La organización Amnistía Internacional (AI) identificó las formas de coacción del gobierno de Daniel Ortega. Entre ellas enumera las detenciones arbitrarias, la creación de cargos falsos y penas judiciales sin justificación. El organismo asegura que el régimen está enfocado en acallar las críticas en Nicaragua.

El país mantiene una crisis política y social desde 2018, cuando se desató la represión contra las manifestaciones. Amnistía planteó que “las autoridades siguen utilizando al poder judicial como uno de los brazos represivos”. La entidad agrega que se encarcelan “a activistas en procesos arbitrarios”.

El informe de IA denuncia las “tácticas” del régimen para “ahogar” a la oposición en el país. El documento también identifica la aprobación de leyes que castigan a las organizaciones civiles. Además denunció la “muerte civil” de opositores, quienes “sufren actos de agresión, intimidación y hostigamiento”.

El organismo cree que existe un “recrudecimiento del hostigamiento” como “tácticas que caracterizan la represión”. Amnistía presentó su investigación después que ONU denunciara al régimen de Daniel Ortega. La oficina de DDHH calificó de “deficiente” la respuesta ante 14 recomendaciones que hizo al régimen de Managua.

La directora para las Américas de Amnistía, Erika Guevara-Rosas, advirtió que “Nicaragua es uno de los países que enfrenta una de las peores crisis de DDHH“. El País expone que para el organismo las detenciones incluyen prisiones “que incluyen falta de acceso a agua potable, alimentos de calidad y altos índices de hacinamiento”.