Explicó los alcances del mal que lo aqueja y su estado actual.
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Ricarte Soto, a través del matinal "Buenos días a todos" de TVN habló por última vez, según sus propias palabras, sobre el cáncer contra el que lucha desde hace 26 meses, y cuyo estado actual salió a la luz tras una entrevista emitida el martes por el programa "Calle 7" de la misma señal.
De todos modos explicitó que "lo estoy pasando muy bien. Si estuviese todo cagado, en mi jardín, haciéndome pipí, y me llegara el cáncer y no tuviera nada que hacer, bueno... pero no estoy en esa. En este momento no me quiero ir, no pienso irme. Puedo aspirar a cuatro años".
En cuanto a su punto de vista respecto de lo que enfrenta, dijo que "desde el momento que a uno le diagnostican el cáncer, tú dejas de ser un ser viviente y eres un sobreviviente. Yo ya llevo sobreviviendo 26 meses. Estoy rompiendo la estadística, porque como a los 22 el porcentaje más alto se va para el otro lado. Creo que esta batalla la voy a ganar, pero una cosa son las batallas y otra la guerra".
El periodista afirmó que en las últimas semanas se ha encontrado muy
cansado y que en abril se le diagnosticó un nuevo tumor. Los resultados
del examen general no fueron buenos.
Según contó, "me descubrieron dos células malignas en el
cerebro, una en el páncreas, más una especie de termitas que me habían
comido un pedazo de vértebra cerca de la columna, por lo tanto, cuando
me leyeron la lista dije ‘estoy cagado', no hay otra expresión".De todos modos explicitó que "lo estoy pasando muy bien. Si estuviese todo cagado, en mi jardín, haciéndome pipí, y me llegara el cáncer y no tuviera nada que hacer, bueno... pero no estoy en esa. En este momento no me quiero ir, no pienso irme. Puedo aspirar a cuatro años".
En cuanto a su punto de vista respecto de lo que enfrenta, dijo que "desde el momento que a uno le diagnostican el cáncer, tú dejas de ser un ser viviente y eres un sobreviviente. Yo ya llevo sobreviviendo 26 meses. Estoy rompiendo la estadística, porque como a los 22 el porcentaje más alto se va para el otro lado. Creo que esta batalla la voy a ganar, pero una cosa son las batallas y otra la guerra".
Aprovechó de dar sus impresiones sobre el sistema de salud pública,
que en su opinión es deficiente para los que no pueden acceder a lo
privado, como él: "En algún momento me sentí incómodo por tener los
medios para hacer todo rápidamente, porque en el cáncer hay que hacer
todo rápido."
"Luego dije ‘por qué soy tan imbécil, si el problema no es que yo reciba este tipo de cuidados, el problema es que en Chile muchos enfermos de cáncer no tienen las posibilidades que yo tengo'", expresó.
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