Lunes 15 de Agosto 2016
RODOLFO ALEJANDRO ESPEJO GOMEZ
Actividad : Estudiante secundario
C.Repres. : Militante de la Juventud del Partido Socialista
F.Detenc. : 15 de agosto de 1974
C.Repres. : Militante de la Juventud del Partido Socialista
F.Detenc. : 15 de agosto de 1974
Rodolfo Alejandro Espejo Gómez, 18 años de edad, estudiante secundario, militante socialista, fue detenido el 15 de agosto de 1974, a las 13:30 horas, en su domicilio y en presencia de su familia, por tres agentes de la Dirección de Inteligencia Nacional, los que no se identificaron y que llevaban a Jorge Fernández, amigo de la víctima, en calidad de detenido. Según lo denunció su madre, Elena Gómez, ante el Tribunal en 1991; los agentes pertenecían a la Agrupación "Aguila" de la DINA, integrada por Miguel Krassnoff Martchenko, Osvaldo Romo Mena, Basclay Humberto Zapata Reyes ("El Troglo") y el Negro Paz ("Pulgar").
Fue este mismo grupo el que, ese mismo día detuvo, con participación de Luz Arce, a Alvaro Miguel Barrios, Sergio Riveros Villavicencio y Gregorio Antonio Gaete (los tres permanecen en calidad de detenidos desaparecidos), además de Julio Cañas y a Heddy Olenka Navarro, posteriormente liberados. Rodolfo Alejandro Espejo, cuando se encontraba recluido en "Cuatro Alamos", contó a Heddy Navarro que en su detención había actuado Luz Arce. Esta última, militante socialista, que con posterioridad a su detención se transformó en colaboradora de la DINA como resultado de las torturas y amenazas sufridas, declaró en 1990 ante la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación que supo de la detención de Espejo Gómez. Dio también a conocer, entre otros varios asuntos, la existencia de la agrupación "Aguila".
El día 15 de agosto de 1974, pasado el mediodía, los agentes llegaron al domicilio de Rodolfo Alejandro Espejo. Abrió la puerta su hermana Katia y el detenido Jorge Fernández, quien no declaró en el proceso por encontrarse expulsado de Chile, lo saludó y le pidió que salieran a la calle a conversar. En el recodo de la escala, el afectado vivía en un segundo piso? había tres individuos más esperándolo, los que lo condujeron hacia una camioneta Chevrolet color amarillo mostaza con toldo de lona verde olivo. El vehículo se encontraba a tres o cuatro casas de distancia, y el afectado fue subido en la parte trasera. Fernández se veía muy nervioso, despeinado y con los ojos enrojecidos.
Horas más tarde, alrededor de las 10 de la noche, Rodolfo Alejandro fue conducido por sus captores hasta el domicilio de Gregorio Antonio Gaete, ubicado en la calle Hugo Donoso. Allí lo recibió el hermano de éste, Miguel Gaete, quien le informó que Gregorio Antonio se encontraba en la casa de su novia, Irma Inés Rivera. El afectado ?que iba acompañado de dos civiles ?manifestó saber donde vivía ella, puesto que eran amigos, al igual que con Gaete Farías. Se fueron, pero a la hora regresó con las mismas personas diciendo que no había encontrado la dirección de Irma Rivera. Miguel Gaete le dio entonces las indicaciones precisas y Rodolfo Alejandro Espejo se dirigió, junto a sus captores, hasta la casa de Irma Inés Rivera, ubicada en calle Julio Montt Saavedra de la comuna de Santiago.
Eran alrededor de las 23:25 horas de ese mismo 15 de agosto de 1974, cuando Rodolfo Alejandro Espejo, junto a dos civiles, llegó al domicilio de Irma Inés Rivera preguntando por Gregorio Gaete Farías. Según la testigo, el afectado se veía muy nervioso, asustado, y no aceptó pasar al living diciendo que era ya muy tarde y que faltaba poco para el toque de queda. Cuando Gregorio Gaete, también socialista y detenido desaparecido, supo que su amigo Rodolfo lo esperaba afuera, se sorprendió de la visita porque hacía ya tiempo que no se veían. Sin embargo, salió a la puerta de calle, se saludaron con Rodolfo Espejo, quien le presentó a uno de sus acompañantes, y se alejaron.
El afectado permaneció recluido en tres recintos de la DINA, siempre incomunicado: Londres 38, casa de calle José Domingo Cañas, ubicada en Ñuñoa, y Cuatro Alamos. Los dos primeros tenían el carácter de cárceles secretas.
Heddy Olenka Navarro, quien fuera detenida el 15 de agosto de 1974, por agentes de la DINA, entre ellos, Luz Arce, Osvaldo Romo, y Basclay Humberto Zapata Reyes ("El Troglo"), declaró que durante su permanencia en Londres 38 supo que ahí también se encontraba Rodolfo Espejo, de quien era amiga y compañera de Partido. Después, cuando ella fue trasladada a la casa de José Domingo Cañas, vio y conversó ahí con el afectado. Rodolfo Alejandro Espejo se le acercó disimuladamente y le recomendó que se abstuviera de tomar agua porque era probable que le aplicaran corriente eléctrica durante los interrogatorios. En una segunda oportunidad en que fue llevada a este mismo recinto, volvió a ver a la víctima. Espejo le contó entonces que había sido torturado e interrogado.
Posteriormente, y ya en Cuatro Alamos, Heddy Olenka Navarro se encontró nuevamente con Rodolfo Espejo, el que le dijo que había sido detenido por Luz Arce el mismo día que ella. Cuando la testigo salió en libertad, el 28 de agosto de 1974, Espejo continuaba en Cuatro Alamos.
Además, Heddy Olenka Navarro relató que, al momento de ser detenida, sus captores la habían llevado hasta el domicilio de Gregorio Gaete Farías, como a las 21 horas, pero que éste no se encontraba en su casa. Desde ahí los agentes la llevaron a Londres 38. En la casa de José Domingo Cañas, la testigo fue interrogada por Luz Arce y Osvaldo Romo.
Por su parte, Roberto Hernán Maturana, detenido el 28 de agosto de 1974 junto a su cónyuge y tres hijos, dos de los cuales permanecen en calidad de detenidos desaparecidos, estuvo también en la casa de José Domingo Cañas para después ser trasladado a Cuatro Alamos. Estando en este último recinto, en el pabellón N°4, celda 8, junto a unos 12 detenidos más, se encontró en la misma celda con Rodolfo Alejandro Espejo, quien era el único que dormía en el suelo, puesto que los camarotes no alcanzaban para todos. Conversó con el afectado, le contó la detención de su amigo Gaete y que había permanecido en Londres 38 en donde fue torturado. Estuvieron en la celda durante una semana. Al cabo de este tiempo, una tarde, los guardias llamaron a Espejo Gómez por su nombre. El afectado salió con ellos y no se volvió a saber de él.
A la vez, la madre, señora Elena Gómez, acudía a distintas partes a indagar sobre el paradero de su hijo. El 14 de septiembre de 1974, encontrándose en la Secretaría Ejecutiva Nacional de Detenidos (SENDET), le informaron que Rodolfo Espejo estaba detenido e incomunicado, pero que no podían informar en qué lugar. Con anterioridad se le había dicho extraoficialmente que su hijo se encontraba en el sector de incomunicados de Tres Alamos, denominado "Cuatro Alamos". Sin embargo, todas las versiones oficiales entregadas al Tribunal negaron este hecho. Posteriormente, el 3 de octubre de 1974, según lo testimonia la señora Elena Gómez, y con ocasión de la visita de la Cruz Roja Internacional a Tres Alamos, el afectado fue sacado de allí. La testigo vio cuando ese día, a las 8:20 horas, entraron al recinto 5 camionetas, sin patente y con toldos. 20 minutos después los vehículos salieron con los toldos cerrados. La última llevaba la carpa semi abierta y todas las personas que se encontraban afuera de Tres Alamos pudieron ver que dentro iban detenidos.
Cuando Orlando José Manzo Durán, Teniente 1° de Gendarmería, Jefe de Cuatro Alamos, declaró, en 1980, ante el Ministro en Visita Servando Jordán, no reconoció a Rodolfo Alejandro Espejo en las fotografías que se le exhibieron. Expresó, sin embargo, que a Cuatro Alamos "la gente llegaba en otras condiciones que las que aparecen en las fotografías, algunos con barba, sucios, mal vestidos". Agregó que en ese recinto se fichaba y fotografiaba a los afectados, pero que cuando éstos se iban, toda la documentación pasaba "para arriba", "en el Cuartel General de la DINA había un estafeta encargado, cuyo nombre ignoro". Señaló que las piezas del recinto estaban numeradas y que allí había alrededor de 15 hombres bajo sus órdenes, cuyos nombres no recordó, "por lo demás cada uno llegaba con una ficha y número, con un nombre de batalla, a uno le decían "El Bigote", a otro "El Polla Gol", "Mauro".
Posteriormente, en julio de 1975, el nombre del afectado apareció en la lista de los 119 chilenos que presuntivamente habían muerto en enfrentamientos en el extranjero. Su nombre se incluía en la nómina publicada por el diario "O'DIA" de Curitiba, Brasil, que sólo apareció por única vez, sin editor ni pie de imprenta. Ningún gobierno lo ratificó oficialmente. Al respecto, el 29 de diciembre de 1975, el Mayor de Ejército Enrique Cid Coubles, de la Secretaría de Derechos Humanos del Ministerio de Relaciones Exteriores, informó al Tribunal que "no hay antecedente oficial alguno de que las personas nombradas en esas nóminas hayan fallecido en el extranjero. Tampoco hay antecedentes de que estas personas hayan salido del país". Por su parte, en 1980, el General de División y Director de Investigaciones, Ernesto Baeza Michaelsen, oficiaba al Ministro Servando Jordán señalando que el afectado no registraba anotaciones de viaje a contar del 15 de agosto de 1974. Raúl Mardones, por orden del Subsecretario de Relaciones Exteriores, informó, también al Ministro Jordán, en 1980, que Rodolfo Alejandro Espejo "no figura saliendo del país por vía del asilo diplomático".
Fue este mismo grupo el que, ese mismo día detuvo, con participación de Luz Arce, a Alvaro Miguel Barrios, Sergio Riveros Villavicencio y Gregorio Antonio Gaete (los tres permanecen en calidad de detenidos desaparecidos), además de Julio Cañas y a Heddy Olenka Navarro, posteriormente liberados. Rodolfo Alejandro Espejo, cuando se encontraba recluido en "Cuatro Alamos", contó a Heddy Navarro que en su detención había actuado Luz Arce. Esta última, militante socialista, que con posterioridad a su detención se transformó en colaboradora de la DINA como resultado de las torturas y amenazas sufridas, declaró en 1990 ante la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación que supo de la detención de Espejo Gómez. Dio también a conocer, entre otros varios asuntos, la existencia de la agrupación "Aguila".
El día 15 de agosto de 1974, pasado el mediodía, los agentes llegaron al domicilio de Rodolfo Alejandro Espejo. Abrió la puerta su hermana Katia y el detenido Jorge Fernández, quien no declaró en el proceso por encontrarse expulsado de Chile, lo saludó y le pidió que salieran a la calle a conversar. En el recodo de la escala, el afectado vivía en un segundo piso? había tres individuos más esperándolo, los que lo condujeron hacia una camioneta Chevrolet color amarillo mostaza con toldo de lona verde olivo. El vehículo se encontraba a tres o cuatro casas de distancia, y el afectado fue subido en la parte trasera. Fernández se veía muy nervioso, despeinado y con los ojos enrojecidos.
Horas más tarde, alrededor de las 10 de la noche, Rodolfo Alejandro fue conducido por sus captores hasta el domicilio de Gregorio Antonio Gaete, ubicado en la calle Hugo Donoso. Allí lo recibió el hermano de éste, Miguel Gaete, quien le informó que Gregorio Antonio se encontraba en la casa de su novia, Irma Inés Rivera. El afectado ?que iba acompañado de dos civiles ?manifestó saber donde vivía ella, puesto que eran amigos, al igual que con Gaete Farías. Se fueron, pero a la hora regresó con las mismas personas diciendo que no había encontrado la dirección de Irma Rivera. Miguel Gaete le dio entonces las indicaciones precisas y Rodolfo Alejandro Espejo se dirigió, junto a sus captores, hasta la casa de Irma Inés Rivera, ubicada en calle Julio Montt Saavedra de la comuna de Santiago.
Eran alrededor de las 23:25 horas de ese mismo 15 de agosto de 1974, cuando Rodolfo Alejandro Espejo, junto a dos civiles, llegó al domicilio de Irma Inés Rivera preguntando por Gregorio Gaete Farías. Según la testigo, el afectado se veía muy nervioso, asustado, y no aceptó pasar al living diciendo que era ya muy tarde y que faltaba poco para el toque de queda. Cuando Gregorio Gaete, también socialista y detenido desaparecido, supo que su amigo Rodolfo lo esperaba afuera, se sorprendió de la visita porque hacía ya tiempo que no se veían. Sin embargo, salió a la puerta de calle, se saludaron con Rodolfo Espejo, quien le presentó a uno de sus acompañantes, y se alejaron.
El afectado permaneció recluido en tres recintos de la DINA, siempre incomunicado: Londres 38, casa de calle José Domingo Cañas, ubicada en Ñuñoa, y Cuatro Alamos. Los dos primeros tenían el carácter de cárceles secretas.
Heddy Olenka Navarro, quien fuera detenida el 15 de agosto de 1974, por agentes de la DINA, entre ellos, Luz Arce, Osvaldo Romo, y Basclay Humberto Zapata Reyes ("El Troglo"), declaró que durante su permanencia en Londres 38 supo que ahí también se encontraba Rodolfo Espejo, de quien era amiga y compañera de Partido. Después, cuando ella fue trasladada a la casa de José Domingo Cañas, vio y conversó ahí con el afectado. Rodolfo Alejandro Espejo se le acercó disimuladamente y le recomendó que se abstuviera de tomar agua porque era probable que le aplicaran corriente eléctrica durante los interrogatorios. En una segunda oportunidad en que fue llevada a este mismo recinto, volvió a ver a la víctima. Espejo le contó entonces que había sido torturado e interrogado.
Posteriormente, y ya en Cuatro Alamos, Heddy Olenka Navarro se encontró nuevamente con Rodolfo Espejo, el que le dijo que había sido detenido por Luz Arce el mismo día que ella. Cuando la testigo salió en libertad, el 28 de agosto de 1974, Espejo continuaba en Cuatro Alamos.
Además, Heddy Olenka Navarro relató que, al momento de ser detenida, sus captores la habían llevado hasta el domicilio de Gregorio Gaete Farías, como a las 21 horas, pero que éste no se encontraba en su casa. Desde ahí los agentes la llevaron a Londres 38. En la casa de José Domingo Cañas, la testigo fue interrogada por Luz Arce y Osvaldo Romo.
Por su parte, Roberto Hernán Maturana, detenido el 28 de agosto de 1974 junto a su cónyuge y tres hijos, dos de los cuales permanecen en calidad de detenidos desaparecidos, estuvo también en la casa de José Domingo Cañas para después ser trasladado a Cuatro Alamos. Estando en este último recinto, en el pabellón N°4, celda 8, junto a unos 12 detenidos más, se encontró en la misma celda con Rodolfo Alejandro Espejo, quien era el único que dormía en el suelo, puesto que los camarotes no alcanzaban para todos. Conversó con el afectado, le contó la detención de su amigo Gaete y que había permanecido en Londres 38 en donde fue torturado. Estuvieron en la celda durante una semana. Al cabo de este tiempo, una tarde, los guardias llamaron a Espejo Gómez por su nombre. El afectado salió con ellos y no se volvió a saber de él.
A la vez, la madre, señora Elena Gómez, acudía a distintas partes a indagar sobre el paradero de su hijo. El 14 de septiembre de 1974, encontrándose en la Secretaría Ejecutiva Nacional de Detenidos (SENDET), le informaron que Rodolfo Espejo estaba detenido e incomunicado, pero que no podían informar en qué lugar. Con anterioridad se le había dicho extraoficialmente que su hijo se encontraba en el sector de incomunicados de Tres Alamos, denominado "Cuatro Alamos". Sin embargo, todas las versiones oficiales entregadas al Tribunal negaron este hecho. Posteriormente, el 3 de octubre de 1974, según lo testimonia la señora Elena Gómez, y con ocasión de la visita de la Cruz Roja Internacional a Tres Alamos, el afectado fue sacado de allí. La testigo vio cuando ese día, a las 8:20 horas, entraron al recinto 5 camionetas, sin patente y con toldos. 20 minutos después los vehículos salieron con los toldos cerrados. La última llevaba la carpa semi abierta y todas las personas que se encontraban afuera de Tres Alamos pudieron ver que dentro iban detenidos.
Cuando Orlando José Manzo Durán, Teniente 1° de Gendarmería, Jefe de Cuatro Alamos, declaró, en 1980, ante el Ministro en Visita Servando Jordán, no reconoció a Rodolfo Alejandro Espejo en las fotografías que se le exhibieron. Expresó, sin embargo, que a Cuatro Alamos "la gente llegaba en otras condiciones que las que aparecen en las fotografías, algunos con barba, sucios, mal vestidos". Agregó que en ese recinto se fichaba y fotografiaba a los afectados, pero que cuando éstos se iban, toda la documentación pasaba "para arriba", "en el Cuartel General de la DINA había un estafeta encargado, cuyo nombre ignoro". Señaló que las piezas del recinto estaban numeradas y que allí había alrededor de 15 hombres bajo sus órdenes, cuyos nombres no recordó, "por lo demás cada uno llegaba con una ficha y número, con un nombre de batalla, a uno le decían "El Bigote", a otro "El Polla Gol", "Mauro".
Posteriormente, en julio de 1975, el nombre del afectado apareció en la lista de los 119 chilenos que presuntivamente habían muerto en enfrentamientos en el extranjero. Su nombre se incluía en la nómina publicada por el diario "O'DIA" de Curitiba, Brasil, que sólo apareció por única vez, sin editor ni pie de imprenta. Ningún gobierno lo ratificó oficialmente. Al respecto, el 29 de diciembre de 1975, el Mayor de Ejército Enrique Cid Coubles, de la Secretaría de Derechos Humanos del Ministerio de Relaciones Exteriores, informó al Tribunal que "no hay antecedente oficial alguno de que las personas nombradas en esas nóminas hayan fallecido en el extranjero. Tampoco hay antecedentes de que estas personas hayan salido del país". Por su parte, en 1980, el General de División y Director de Investigaciones, Ernesto Baeza Michaelsen, oficiaba al Ministro Servando Jordán señalando que el afectado no registraba anotaciones de viaje a contar del 15 de agosto de 1974. Raúl Mardones, por orden del Subsecretario de Relaciones Exteriores, informó, también al Ministro Jordán, en 1980, que Rodolfo Alejandro Espejo "no figura saliendo del país por vía del asilo diplomático".
Fuente: Memoria Viva.
Subido: Por Marcos Rodriguez Gonzalez.
Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos.
CHILE.
Subido: Por Marcos Rodriguez Gonzalez.
Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos.
CHILE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario