Tras una consulta realizada por The Clinic Online, Gendarmería ratificó la información de este medio respecto del descubrimiento, el pasado viernes de la ausencia de un fusil Famae y una subametralladora, también Famae, desde la sala de armas de Punta Peuco, las que fueron ubicadas horas más tarde en un sector cercano y al que no tiene acceso la población penal.
La Dirección Regional Metropolitana instruyó, según comunicó Gendarmería, la realización de un sumario administrativo interno en el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Punta Peuco y se denunció lo ocurrido al Fiscal Jefe del Ministerio Público de la Jurisdicción de Chacabuco, quien instruyó tomar declaración a los funcionarios que se encontraban de servicio.
Además, se ordenó la presencia de funcionarios de la BICRIM de la Policía de Investigaciones de Chile, los cuales se constituyeron en el lugar para desarrollar los procedimientos de rigor y se dispuso la redestinación de la jefatura de la unidad.
El penal Punta Peuco tenía hasta el 31 de julio de este año a 122 reclusos que cumplen condenas por violaciones a los derechos humanos.
El recinto comenzó a funcionar el año 1995 y desde el cierre del Penal Cordillera, también destinado a militares, está en agenda el posible traslado de los detenidos a cárceles comunes.
Ello porque la Nueva Mayoría y organizaciones de derechos humanos han hecho ver que el centro penal va contra la igualdad de los reclusos, entregando condiciones de privilegio a los ex militares.
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