By Resumen Latinoamericano mayo, 2025

Por Nicolás Castañeda /Resumen Latinoamericano, 8 de mayo de 2025.

Cuando el filósofo marxista húngaro Georg Lukacs hablaba del realismo dentro de la literatura y el arte, se refería como realismo a la creación representase algún fenómeno no como un hecho aislado, sino más bien en torno a las relaciones que afectan a dicho evento o como este afecta a otros fenómenos de la realidad, es decir, teniendo en cuenta la intrincada simbiosis del objeto con su contexto. Este proceso viene del método dialéctico: uno piensa abstractamente cuando se permite juzgar los hechos de una manera que separa los hechos de los factores que crearon las condiciones para que los hechos sean hechos, pensar concretamente es analizar cómo los hechos y factores se interrelacionan y se afectan entre sí. Ahora bien, criticar hechos, como fue la declaración de la candidata presidencial por la coalición política de derecha y extrema derecha, Chile Vamos, la candidata Evelyn Matthei: “Era necesario. Si no, nos íbamos derechito a Cuba. No había otra alternativa”, sólo como un hecho de la profunda maldad intrínseca a los políticos de la derecha chilena sin hacer la relación de este con todo el aparataje político-histórico que conlleva y encierra dicha frase es quedar en un nivel analítico abstracto.
Marx señalaba que la violencia es la partera de toda sociedad vieja que lleva en sus entrañas otra nueva, o sea, todo proceso revolucionario es un acto de imposición de una parte de la humanidad sobre otra, que también ocupa todas las herramientas a su disposición para resistirse a ser sometida ¿Es que acaso el proceso de la UP estaba exento a todas estas reglas?
Cuando Matthei reconoce la inevitabilidad del golpe de Estado, no ignora el peso de sus afirmaciones -incluso sabiendo lo impopular que puede ser para su candidatura- pues es una convencida de su ubicación social y del proyecto histórico que debe defender. Con estos dichos sólo atestigua que la lucha de clases en ciertos momentos debe ventilarse por medio de la violencia implacable, sin impedimentos éticos o morales sobre sus enemigos e irremediablemente debe mantener su dominio por medio del terror.
Seis días antes del golpe, los cordones industriales ya le habían advertido a Allende de lo inevitable, del callejón sin salida al que estaba conduciendo el proceso de la UP y el inminente desenlace fascista y la arremetida criminal que se avecinaba sobre los trabajadores. El poder popular expresaba ese momento de la lucha de clases en que la desestabilización institucional burguesa deja de solo ser una crisis política y su reordenamiento no depende de esfuerzos por medios democráticos ¿Acaso Allende si lograba convocar a un plebiscito para resolver la crisis impedía el derramamiento de sangre?
El golpe militar no fue solo una decisión política ni fue un desliz del quiebre de los valores del orden constitucional, ni los horrorosos crímenes y la violencia exacerbada fue un desacierto moral para sus ejecutores. La violencia era el único medio que podían utilizar para frenar el avance de un poder de clase contrahegemónico. En el núcleo de ese proceso están las razones del alzamiento militar y también de la derrota del Poder Popular. La caída de Allende no se debió a sus reformas, sino a su incapacidad para controlar el movimiento revolucionario autónomo del movimiento obrero y popular. La Junta militar, consciente de esta amenaza, se dedicó a eliminarla por completo. Es la fase más encarnizada de la lucha de clases desarrollada durante el sXX en el territorio chileno
Gramsci veía en Maquiavelo una ruptura con las concepciones abstractas y trascendentales de la moral en la política. Para Gramsci, Maquiavelo no ofrecía una justificación inmoral del poder, sino un análisis realista de las condiciones necesarias para fundar y mantener un Estado en un contexto histórico específico. La lectura que hace Gramsci de Maquiavelo sobre la moral en la política se centra en la historicidad y la funcionalidad de la ética en la acción política transformadora. No se trata de una justificación de la inmoralidad por el poder, sino de una comprensión de que la moralidad política está intrínsecamente ligada a la consecución de objetivos históricos concretos y a la construcción de una nueva hegemonía. Más allá de la lucha de clases y su violencia desatada, significó la derrota y muerte de miles de compañeros y compañeras que dejaron un enorme dolor: “Ni los muertos estarán seguros ante el enemigo si éste vence. Y es ese enemigo que no ha cesado de vencer.”
By Resumen Latinoamericano on 8 mayo, 2025
No hay comentarios:
Publicar un comentario