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POLÍTICA

 20 DE JUNIO DE 2025

El plan BRICS de Boric: los motivos del Presidente Boric para asistir a la cumbre internacional en medio de arremetida opositora

Desde La Moneda buscan ampliar las relaciones comerciales y, considerando el contexto internacional, pretenden fomentar la autonomía estratégica del país. Si bien desde la oposición han sido críticos por el acercamiento a países como Rusia e Irán, desde el Gobierno señalan que no corresponde politizar las relaciones diplomáticas del Estado. Por ahora, no está en los planes del Gobierno ingresar al BRICS; de hecho, Chile ha sido invitado únicamente a esta cumbre. Sin embargo, desde el Ejecutivo advierten que existen al menos tres consideraciones que deben evaluarse antes de abrir siquiera ese debate.

Por Rodrigo Córdova 

El domingo 6 de julio, el Presidente Gabriel Boric emprenderá vuelo a Río de Janeiro, Brasil, para participar en la Cumbre de los Líderes de BRICS 2025. Esta sería la segunda vez que el Estado de Chile participa como invitado en esta instancia, luego de que la expresidenta Michelle Bachelet asistiera en 2014. Si en esa oportunidad el objetivo era ampliar las relaciones económicas, ahora, además, La Moneda considera el contexto mundial como un factor que hace distinta esta visita.

Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica son los miembros originales del grupo internacional, de ahí su sigla. A ellos, entre el año pasado y este, se sumaron Egipto, Etiopía, Indonesia, Irán, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos. Además, se encuentran los llamados “países socios”: Argelia, Bielorrusia, Bolivia, Cuba, Indonesia, Kazajistán, Malasia, Nigeria, Tailandia, Turquía, Uganda, Uzbekistán y Vietnam.

Desde La Moneda señalan que asistir al la Cubre BRICS se trata de una oportunidad que puede contribuir a uno de sus principales objetivos de aquí a que termine la administración: obtener resultados significativos en política comercial internacional. Además, de reecontrarse con importantes socios como lo es India, Brasil, Emiratos Árabes, Indonesia y China. 

Es por eso, y dado el contexto global, que el Gobierno ha puesto especial énfasis en fomentar el multilateralismo con el sur global. De ahí, explican desde el Ejecutivo, justamente las visitas a los Emiratos Árabes Unidos en 2024, a la India en abril y a China el mes pasado.

Las razones del Gobierno para asistir a la cumbre en Brasil, además de que el Presidente Boric fue invitado por el mismo mandatario brasileño Lula Da Silva, no fueron suficientes para la oposición.

Por ejemplo, el jueves la bancada de diputados UDI envió una carta firmada por los diputados Henry Leal, Felipe Donoso y Marlene Pérez, en la que expresan su preocupación por la participación en dicho encuentro. “No es posible obviar que estamos ante un foro que, en definitiva, agrupa a una serie de países que mantienen un historial innegable en materia de violaciones a los derechos humanos, lo que ha sido denunciado en múltiples instancias internacionales”, señalan en la misiva.

Por lo demás, el abanderado presidencial del Partido Republicano, José Antonio Kast, también levantó la alerta: “La decisión del Presidente Boric de sumarse a la cumbre de los BRICS en Brasil pone en serio riesgo la seguridad nacional y el posicionamiento internacional de Chile. No podemos alinearnos con dictaduras como la de Cuba, que lleva más de 60 años oprimiendo a su pueblo, ni con regímenes como el de Irán, una república teocrática conocida por su respaldo al terrorismo internacional”.

Desde La Moneda señalan que anticiparon este flanco y elaboraron un diseño para la participación del Presidente. Por ejemplo, algunas consideraciones específicas sobre cómo relacionarse —o no— con este bloque internacional del sur global. 

El plan BRICS

Desde La Moneda señalan que tienen en consideración el complejo contexto internacional, a propósito de la guerras bélicas y arancelarias. Es por eso que el norte está puesto en una política de Estado que fomente la autonomía estratégica, según señalan desde el Gobierno. Es decir, diversificar sus relaciones comerciales y planes de cooperación internacional para paliar una dependencia comercial con un solo país.

Es ese el argumento que se sustenta detrás de la asistencia del Presidente a la cumbre, advierten desde el Ejecutivo. Ahora, sobre los argumentos que se esgrimen en contra de su asistencia, desde La Moneda insistirán en el mensaje de que no corresponde politizar las relaciones diplomáticas del Estado.

La idea, de hecho, está en que el Presidente siga apareciendo como un promotor del multilateralismo, el diálogo entre países y la necesidad de abordar los desafíos futuros desde la integración.

En cuanto a la adhesión al bloque BRICS, sin embargo, desde el Gobierno entienden que ese acto enviaría una señal política internacional importante y podría afectar el equilibrio diplomático. Eso por eso que, sostienen desde el Ejecutivo, es algo que no se encuentra en evaluación.

Si bien no descartan dar el debate sobre una eventual entrada a esa plataforma, se advierte de que este debe ser amplio, pues hay voces a favor y en contra en el mundo político y también en el mundo privado. Ahora bien, desde el Ejecutivo señalan que se deben tener al menos tres consideraciones para abordar un eventual acercamiento más profundo al BRICS.

En primer lugar, comprobar si efectivamente una entrada a este bloque abre las posibilidades comerciales internacionales. Segundo, dar cuenta de si este grupo contribuye al mejoramiento de políticas públicas, como por ejemplo lo hace la OCDE, que tiene un foco de desarrollo en buenas prácticas. Ejemplo de ello es el Gobierno corporativo de Codelco y la institucionalidad ambiental de Chile.

Por último, advierten que es importante ponderar el movimiento en clave geopolítica. Si bien hay países más cercanos a Chile como Brasil, China e India, también se encuentra Rusia y Irán, que este último entró en la guerra de Gaza con Israel las últimas semanas y desde el Gobierno entienden que un acercamiento a ellos podría generar una señal de la cual hay que estar consciente y, además, hay que revisar si existe alguna incompatibilidad para ingresar a dicho grupo.

Desde la Cancillería señalan que Chile asiste como observador invitado a la reunión de los BRICS, en la misma calidad que asistimos a la reunión del G20 el año pasado, participación que no desencadenó nuestro ingreso a ese grupo.

Para ambas reuniones, advierten estas fuentes, Chile fue invitado por el organizador de las cumbres, Brasil, que además es un país amigo y aliado histórico en la región. Y así como el Estado chileno, hay otros países que habitualmente son invitados a esos encuentros, así como Turquía, Vietnam, Azerbaiyán, Kenia, Palestina, Uruguay, México y Colombia.

Con todo, desde la Cancillería indican que Chile no está trabajando para concretar una solicitud de ingreso a los BRICS, pues “estamos concentrados en concretar tareas ya comprometidas en materia internacional. Aceptamos esta invitación, como muchas otras, con el objetivo de profundizar la estrategia de diálogo y diversificación de Chile, siempre buscando disminuir nuestra dependencia y fortalecer nuestra autonomía”.