By El Clarín de Chile Enero 2020
Con antiparras y mascarillas participaron en la comisión de Salud representantes del Colegio Médico con el fin de exponer su opinión respecto del proyecto que prohíbe el uso excesivo de la fuerza, así como la utilización de medios disuasivos que afecten la integridad física de las personas y que exige el respeto de los derechos humanos por parte del personal policial, en el contexto de control o disolución de manifestaciones públicas.
La presidenta del colegio, Izkia Siches, concurrió a la instancia con los representantes del Departamento de Derechos Humanos, los doctores Enrique Morales (presidente) y Waldo Wilkinson, quienes expusieron los antecedentes que han podido recoger durante las movilizaciones sociales.
Si bien aseguran que previo a octubre de 2019 ya registraban acciones vulnerativas por parte de fuerzas policiales, como el uso de balines, bombas lacrimógenas, golpizas, violencia sexual y psicológica, junto a retraumatización; posterior a esa fecha se evidenció también el atropello por móviles de Carabineros, quemaduras de piel por agua con químicos del carro lanzaguas y acciones en contra de equipos de salud.
En la comisión, alertaron, además, sobre las cifras de trauma ocular severo, que hasta el 3 de enero de 2020 llegaban a los 361 casos. A su juicio, los datos son preocupantes, pues si se comparan con conflictos en otras partes del mundo, el único que se acerca son los ocurridos en Israel, entre los años 1987 y 1993, que registró 154 casos.
Los médicos también denunciaron el uso de gases no autorizados. Tal es el caso del gas amarillo, que es vomitivo y contiene arsénico. Este tipo de gas puede envenenar el agua y los alimentos con los que entre en contacto
No hay comentarios:
Publicar un comentario