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lunes, 21 de mayo de 2018

SQM espera el perdonazo haciendo negocios con el litio. Por Mario López M.

A partir del acuerdo de Soquimich con Corfo, que dio a la minera no metálica una nueva ampliación de plazo para la explotación del mineral y de paso aumentó la cuota de explotación, se han venido desarrollando una serie de acuerdos internacionales que involucran los salares y hasta en know how. En paralelo, el juicio criminal por corrupción llega a su fin y al parecer no tendrá el perdonazo del caso Penta.
Han pasado solo unos meses desde que se cerrara el espurio acuerdo entre Corfo y Soquimich, que puso fin a los juicios que tenía el ente estatal en contra de la empresa de Ponce Lerou por incumplimientos graves a los contratos, y de “yapa” la terminó beneficiando. Los primeros resultados comienzan a palparse por la minera, pero no por el país.

Por el contrario, cada vez se aleja más la posibilidad de que Chile implemente una planta procesadora de última generación y exporte no solo material bruto, sino que procesado, lo que reportaría mayor empleabilidad de mano de obra, mejor tecnología y más ingresos. 

A Australia los pasajes

El gobierno del Estado de Oceanía suscribió con Soquimich y la empresa australiana Kidman Sources un acuerdo que concede una opción para un terreno al sur de la ciudad de Perl donde se instalará una planta refinadora y donde se pretende procesar litio a partir de concentrado de espodumeno (mineral de litio). Se proyecta que entre en operaciones en 2021 y que produzca unas 40 mil toneladas métricas de carbonato de litio equivalente (LCE). 

Ello se sumaría a lo que se produce por SQM en el Salar de Atacama, que el año pasado llegó a 50 mil toneladas, y se espera que este año -con la ampliación del acuerdo con la Corfo- la producción alcance las 70 mil toneladas, a unos US$ 14 mil dólares por tonelada. Según los directivos de la minera, la demanda del mineral crecería en cerca de 18% anual para los próximos años y por ello, sostienen, “para satisfacer esta demanda se requiere aproximadamente un nuevo proyecto grande cada año. También, dada nuestra importancia como proveedores y la importancia relativa para nuestros clientes, es importante tener una base productiva diversificada geográfica y jurisdiccionalmente”.

Extraño, por decir lo menos, que SQM invierta (hasta hoy) cifras superiores a 40 millones de dólares en Australia, valor que no ha invertido en tecnología, mano de obra o reportado como impuestos en Chile.

“¡Una vergüenza, que un país serio y prestigioso como Australia negocie con una empresa criminalizada como SQM!”, dice a Cambio21 el abogado y miembro de los movimientos de Defensa del Litio para Chile, Roberto Mayorga. El drama es que resulta viable pensar que todo o parte del material bruto que se exporta de Chile –que contiene otros minerales valiosos-, se lleve a la nueva planta de Australia y eso quite la posibilidad de desarrollar una industria del litio en nuestro país.

No todo lo que brilla es… litio

El banco de inversión internacional Morgan Stanley, voz autorizada sobre el tema, emitió un informe sobre el mercado del litio que golpeó duramente a SQM. En resumen el documento consignaba, al revés de lo que piensa Siquimich, que los nuevos proyectos de este mineral y las expansiones planificadas por los mayores productores en Chile, habrá  una sobreproducción de alrededor de 500 mil toneladas métricas por año a la oferta global proyectada para 2025.

Pero eso es solo un aspecto, porque lo que vendría después hizo temblar a Ponce Lerou y sus boys. Con la sobreoferta, sostenía Morgan Stanley, el precio del carbonato de litio hacia 2021 habrá caído en torno a 45%, desde los US$ 14 mil por tonelada proyectados para este año. Apenas apareció el informe original (febrero), las acciones de SQM cayeron en 9,02%, el mayor desplome desde que se conocieran las vinculaciones de la empresa minera no metálica con los casos de corrupción política que mantienen formalizada a la empresa, sus principales administradores y a cientos de políticos, boleteros truchos y operadores políticos.

Según el banco de inversión, se estima que SQM doblará su producción de litio en 2019 y la duplicará para 2023, lo que es favorable para la empresa “pero negativo para los precios del litio”. Soquimich, busca desembozadamente la venta del negocio a intereses chinos, tal como lo pretende su socia Nutrien, la actual socia canadiense (32%) que espera anunció la venta de su participación en la productora chilena de litio y fertilizantes SQM para fines del segundo trimestre.

Claro que la venta se les puede complicar, pues en marzo pasado el Gobierno de la Presidenta Bachelet recurrió al Tribunal Antimonopolio para bloquear eventuales ofertas chinas, "ya que podría dar al país asiático una posición dominante en la carrera por recursos para el desarrollo de las baterías usadas en vehículos eléctricos”.
Se cunplió la peor de las amenazas, el litio chileno a manos chinas, solo falta que Ponce Lerou le venda su parte...

La movida del Fiscal Gómez

Si bien Pablo Gómez, mano derecha de Jorge Abbott -el Fiscal Nacional-, y quien se ha destacado por el perdonazo al senador UDI Iván Moreira, ofrecer salidas alternativas por graves delitos de corrupción o lisa y llanamente por no perseverar en contra de operadores y boleteros, esta vez de modo enigmático echó pie atrás y dio a conocer que llevará a juicio oral a algunos de los implicados en los casos contrarios a la probidad y fe pública. 

¿Qué significa eso? Las interpretaciones son varias y variadas. Para algunos es consecuencia de la “camotera” que sufrió cuando entre noviembre pasado y principios de este año se desistió de la formalización de SQM y llegó a acuerdo con el confeso senador Moreira. Para otros, una mera limpieza de imagen, recordando de paso que el fiscal Manuel Guerra en Santiago habría dicho lo mismo y a última hora había dado un perdonazo a los controladores de SQM y al exsubsecretario de Piñera, Pablo Gómez, desechando el delito de soborno y cohecho, respectivamente. 

Para Mayorga, se trata de una “estrategia comunicacional. Más adelante recogerá el argumento de las defensas en el sentido que no existiendo ilícito en SQM, no puede haberlo en los que recibieron sus prebendas...”, afirma. Desde los querellantes particulares se asegura a Cambio21 que Gómez espera qué se resolverá en el caso Penta con los recursos pendientes, para asumir similar conducta. 

Por lo pronto, se espera que el próximo mes se haga efectiva la acusación en la causa que ya lleva más de tres años, aunque el número de los formalizados y los acusados diferirá fuertemente, porque respecto de muchos no se perseverará y a otros se les ofrecerá medidas alternativas de baja intensidad. 

Los mal pensados aseguran que dado que las investigaciones a cargo de Gómez no han sido lo suficientemente “profundas”, la presentación sin mayor sustento de las acusaciones abren una posibilidad cierta de absolución de los querellados, lo que alcanzaría no solo a los mandamases de SQM implicados (Gómez nunca tocó a Ponce Lerou), sino que también a algunos políticos connotados, entre ellos al propio Pablo Longueira, vinculado seriamente en el tema de la Ley del Royalty.  “Se viene la madre de todos los perdonazos”, asegura un abogado querellante a nuestro medio.

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