Existe bastante literatura y líneas de pensamiento, entre las cuales se encuentra la Nueva Geografía Económica, que han realizado importantes aportes sobre la puesta en evidencia de las propiedades de la organización espacial del capitalismo. En las últimas semanas también se han registrado muchas e interesantes publicaciones con reflexiones entorno hacia donde mutará el modelo económico hegemónico en el mundo
En la historia de la humanidad, se encuentran múltiples expresiones de cambios epocales que, a su vez, vienen aparejados con cambios en la geopolítica y la distribución espacial del poder. El historiador francés Fernand Braudel señala que cada vez que se produce un descentramiento, tiene lugar un recentramiento, como si una economía-mundo no pudiese vivir sin un centro de gravedad, sin un polo. En el caso de Europa y de las zonas anexionadas por ella, “se opera un centramiento hacia 1380, a favor de Venecia. Hacia 1500, se produjo un salto brusco y gigantesco de Venecia a Amberes y después, hacia 1550-1560, una vuelta al Mediterráneo, pero esta vez a favor de Génova; finalmente, hacia 1590-1610, una transferencia a Ámsterdam, en donde el centro económico de la zona europea se estabilizará durante casi dos siglos. Entre 1780 y 1815 se desplazará hacia Londres, y en l929, atravesará el Atlántico para situarse en Nueva York”
Ahora bien, la pandemia nos tiene a muchos en modo teletrabajo y muchos piensan que esa modalidad se mantendrá en el futuro, aun si la pandemia es controlada y se descubre la vacuna correspondiente. Conocidos son los impactos espaciales y territoriales que han tenido y tienen las nuevas tecnologías. En materias urbanas, por ejemplo, hubo cambios tecnológicos que provocaron grandes transformaciones, como es el caso de las ciudades amuralladas, que dejaron de tener sentido cuando los grandes cañones demostraron su capacidad de destruir los enormes murallones de protección.
Ahora bien, la tecnología 5G cobra una importancia vital en el Data Capitalismo pues proporciona las condiciones técnicas para seguir avanzando en la llamada Nueva Economía, que tiene en el dinero electrónico, el teletrabajo y en la robótica sus “puntas de lanza digitales”.
La visita de Mike Pompeo en 2019
El 12 de abril de 2019, Mike Pompeo aterrizó en Santiago de Chile, como parte de una gira que incluía varios países latinoamericanos. En la oportunidad, la prensa informó que la visita tenía como objeto discutir con el gobierno chileno sobre la crisis venezolana Pero las declaraciones del Secretario de Estado de los Estados Unidos de Norteamérica referidas a China y Huawey, dejaron en claro que su viaje tenía como objetivo exponer los puntos de vista de Trump en torno a la relación de Chile con el gigante asiático. En días posteriores a la visita del enviado de Trump, en abril del año pasado, el presidente Piñera iniciaba su visita a China y Pompeo no tuvo ningún problema en expresar en público su opinión negativa sobre la probable visita del Presidente Piñera a las instalaciones de Huawei.
Pompeo no ahorró palabras para señalar que “si ustedes usan esos sistemas de información forzaran a Estados Unidos a tomar decisiones en cuanto a donde ponemos nuestra información también”. Se refería sin duda a la tecnología 5G. Y no se detuvo ahí y realizo otra advertencia a Piñera cuando señaló que China inyecta “Capital Corrosivo” a las economías que interactúan con ella. Es decir, mantiene el argumento de que la economía China crece teniendo una especie de “dumping” perverso basado en la copia y el no pago de patentes y quienes los prefieran a ellos como socios comerciales, se van a contaminar. Sin embargo, la posibilidad ya casi hecha realidad de que Huawei pueda instalar la infraestructura del 5G en el mundo es un mentís rotundo a la afirmación de la ausencia de innovación pues demuestra que los chinos han invertido muchísimo en Investigación y Desarrollo e Innovación. Son varias las empresas chinas, y Huawei es una de las pioneras, que aparecen encabezando los rankings de inversión en I+D+I y cada vez son más las patentes tecnológicas inscritas por los asiáticos. Es decir, están tomando una ventaja real sobre Europa y USA y lo están haciendo hace tiempo en una “larga marcha” que los tiene ad portas de liderar la infraestructura del 5G con las implicancias geopolíticas que esto tendrá.
Sabido es que China y la empresa de Smartphone están trabajando para que Puerto Williams sea el extremo sur de su infraestructura 5G y de ahí se desprende la importancia del Chile en esas materias pues nuestro país se convertiría en el nodo sur de esta red.Sabido es también que Chile tiene a China como su principal socio comercial y nuestros vecinos están cada vez más utilizando nuestros puertos para vincularse al Asia Pacifico. La reciente habilitación del nuevo paso Pehuenche ha sido muy celebrada por empresarios argentinos deseosos de comerciar con Xi Jinping y los suyos.
Siguiendo a Braudel, parece que estamos viviendo un nuevo “centramiento” geopolítico del mundo. Y así como algunas vez fueron Venecia, Génova, Ámsterdam, luego Londres y finalmente Nueva York, es posible que Beijing sea en el corto plazo el nodo principal de la nueva red de poder político mundial.
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