La deriva autoritaria de la derecha y ultraderecha amplificada por la histeria de los matinales y los medios tradicionales escritos ya es un torrente desbordado de muy difícil canalización. Ayer la Cámara de Diputados y Diputadas aprobó de manera insólita cinco proyectos de la agenda de seguridad, la mayoría simples normas efectistas que apuntan al aumento de penas y prohibiciones que terminarán por colocar más obstáculos a los ciudadanos que a quienes supuestamente van dirigidas.
Un espectáculo riesgoso que ya tiene en la mira como objeto de debate a los derechos humanos. Las declaraciones de Evelyn Matthei que justificaron las violaciones a los derechos humanos durante la revuelta popular, con decenas de muertos y centenares de mutilados, no son palabras sin filtros sino el señuelo de una muy hábil y experimentada y ya vieja política que no oculta su admiración por la dictadura. Matthei, y bien sabemos sus orígenes y trayectoria, hizo un provocativo gesto, más bien una mueca, para colocar un símil, una perversa comparación en la agenda entre la dictadura, el golpe, y el aumento hoy de la delincuencia. Aquello, escuchó la galería de los matinales, se resuelve con más atribuciones a los carabineros.
Rodolfo Carter
El escenario está abierto y acepta a invitados. Rodolfo Carter, el alcalde populista pro UDI de La Florida, que es otro favorito de los matinales y de la aterrada audiencia, llegó al funeral de Rita Olivares junto a las cámaras y el apoyo en las encuestas. Carter está en alza haga lo que haga: según Cadem, el 87 por ciento de los consultados está de acuerdo con la demolición de las casas de narcotraficantes.
Abuchearon en Villa Alemana al presidente Gabriel Boric en el funeral de la carabinera asesinada. No era su mejor público, posiblemente compuesto de familiares de policías, pero no tenía otra opción. Pero no era necesario arrodillarse nuevamente ante la derecha al renegar de sus anteriores críticas a carabineros por los crímenes durante el estallido social. Una entrega más a la agenda de la derecha, que hoy parece infiltrada en la misma conciencia del gobierno.
La derecha busca la impunidad de carabineros y prepara la ley Nain Retamal en homenaje a dos carabineros asesinados. Ayer aprobó en unas pocas horas cinco propuestas y esta tarde presenta su propio proyecto ya refrendado por la ministra del Interior que llama a las dos coaliciones de gobierno a aprobarla. Con esta ley de gatillo fácil Carabineros no responderá por sus acciones y la deriva autoritaria no tendrá freno.
La derecha impone su agenda y el gobierno la ejecuta.
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