Foro Latinoamericano de Derechos Humanos / Fotografía de Agencia UnoLuego de la última jornada del Foro Latinoamericano de Derechos Humanos realizado en Chile, desde la instancia se hizo énfasis en la principal conclusión del encuentro: la urgencia de detener la violencia y la vulneración de derechos fundamentales en toda América Latina.
La mañana de este sábado se realizó la última jornada del primer Foro Latinoamericano de Derechos Humanos en Chile, instancia en la que diferentes comisiones expusieron sobre la violencia policial y las vulneraciones por parte de agentes del Estado de las que el país ha sido testigo desde el 18 de octubre pasado.
Fue en el Salón de Honor del ex Congreso Nacional, que diferentes expositores y organizaciones conversaron sobre materias a considerar con miras al proceso constituyente de los próximos meses. Además, los y las asistentes también recibieron la visita de representantes de la primera línea, que irrumpieron en la sala para leer un discurso sobre la criminalización del movimiento.
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Tras la masiva participación de más de 1.300 personas, con ponencias durante tres días en las que expusieron autoridades como Dilma Rousseff y Baltasar Garzón, se hizo hincapié en las principales conclusiones finales de la reunión, en las que se hace un llamado a detener los abusos y violencia de derechos humanos en toda Latinoamérica.
Así lo informa Bío Bío Chile, que pudo conversar con el organizador del evento, Jonatan Díaz, quien sostuvo que “este movimiento social ha instalado conceptos y visiones de transformación de la sociedad. Esas son las principales cosas que se han debatido acá: cómo impregnamos la nueva constitución en el capítulo de los derechos fundamentales, entendiendo que los derechos humanos no solo están circunscritos a una rama del derecho, una rama histórica, de memoria, verdad o justicia, sino que hoy en día los derechos humanos lo son todo“.
Por su parte, el senador Alejandro Navarro también recalcó que se debe terminar con la violencia por parte de los agentes de los que dispone el gobierno. “Hemos abierto una puerta para que más de 40 delegados internacionales puedan contar la realidad que han observado en Chile”, destacó el congresista.
“Creo que es una señal y un mensaje para el gobierno. Los derechos humanos van a ser defendidos y el gobierno no puede insistir en la política de represión que ha llevado hasta ahora. De aquí en adelante, la denuncia va a ser internacional“, concluyó Navarro.
Por útlimo, la parlamentaria ecuatoriana Doris Soliz se refirió a el distanciamiento que ha tomado la ciudadanía de las autoridades políticas en Chile.
“Es difícil pronunciarnos tan específicamente. Yo creo que un gobernante se debe al pueblo. Los cargos no son eternos, y un Presidente tiene su razón de ser en la medida en que es aceptado por el pueblo, en que sintoniza con las demandas del pueblo. Aquí se ve una clara fractura entre el poder político y la ciudadanía“, aseguró la socióloga y representante de Ecuador.
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