Santiago 8 de
agosto 2015
Señor
Humberto
Oviedo Arriagada.
Comandante en
Jefe del Ejército de Chile.
Presente.
La Agrupación
de Familiares de Ejecutados Político se dirige a usted ante el deceso del reo
Manuel Contreras ex Director de la DINA, uno de los más grandes violadores de
Derechos Humanos junto al dictador Augusto Pinochet, ambos militares, y
responsables de torturas y asesinatos de muchos hombres y mujeres de nuestro
país.
Manuel
Contreras fue el ejecutor principal de la sistemática práctica que tuvo la
DINA: El Crimen.
Asimismo
autor de la detención y desaparición de miles de chilenos y chilenas que aún se
encuentran Detenidos Desaparecidos.
Como es
conocido públicamente, Manuel Contreras estaba condenado, según datos del
Observatorio de Justicia Transicional de la Universidad Diego Portales, a un
total de penas actuales e históricas confirmadas por la Corte Suprema de 446
años y 20 días de prisión, considerando además las múltiples causas en que
pesaban condenas o procesamientos en su contra aún sin confirmar.
Manuel Contreras murió enfrentando más
de medio millar de años de cárcel por sus crímenes de Lesa Humanidad, cometidos en los 17 años que duró la Dictadura Cívico
Militar, sin embargo usted, como Comandante en Jefe del Ejército, y a pesar de
los sólidos antecedentes jurídicos y humanos, ha permitido que no fuera degradado
de su rango de General, teniendo los instrumentos para ello a través del Código
de Justicia Militar, Art. 222. “La pena de muerte y
las de presidio y de reclusión perpetuas lleva consigo la degradación. Las
penas de crimen, no comprendidas en el inciso anterior, llevan consigo la
destitución. Las penas de simples delitos que tienen el carácter de aflictivas,
llevan como accesoria la separación del servicio”.
Señor
Oviedo, como familiares de hombres y mujeres asesinados por este ex militar,
exigimos que a Manuel Contreras se le degrade “AHORA”, y no se le rinda ningún
tipo de honores por memoria de nuestros seres queridos, por la dignidad de
nuestro país, y esperamos una señal para que las FFAA nunca más se conviertan
en verdugo de su pueblo.
De
esta forma, exigimos romper el pacto de silencio institucional. Los hechos de
connotación pública dados a conocer últimamente refuerzan nuestra permanente
denuncia.
Al
mismo tiempo, demandamos terminar con la red de apoyo a los victimarios de los
crímenes de violaciones de Derechos Humanos, como el caso del oficial en retiro Julio Castañer,
quien está procesado en el caso de los quemados donde sobrevivió Carmen Gloria
Quintana y el crimen de Rodrigo Rojas De Negri. Por tanto, se deben entregar
los nombres de los funcionarios, y agentes de los aparatos represores como la
ex CNI que aún están en las filas del Ejército.
Señor
Oviedo, usted debe cumplir ahora con esta deuda pendiente con la sociedad, y
con las víctimas del terrorismo de Estado.
ATTE.
Agrupación
de Familiares de Ejecutados Políticos.
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