Por Teresa Frías K.
Dirigentes políticos opinan que la "tentación del autoritarismo" está presente en los partidos políticos de la derecha, situación que quedó en evidencia con los vítores y aplausos que recibió la mención a Patria y Libertad por el precandidato presidencial de la UDI Laurence Golborne.
Dirigentes políticos opinan que la "tentación del autoritarismo" está presente en los partidos políticos de la derecha, situación que quedó en evidencia con los vítores y aplausos que recibió la mención a Patria y Libertad por el precandidato presidencial de la UDI Laurence Golborne.
Aún
hay ecos de lo que fue la proclamación de Laurence Golborne como
candidato UDI, y es que los aplausos y vitores al movimiento paramilitar
de ultraderecha Patria y Libertad vertidos por los militantes
gremialistas ha traído más molestia que apoyo.
Durante el acto, el candidato no previó que muchos militantes de la UDI son admiradores y seguidores de ese grupo político que participó en acciones delictivas y terroristas durante el gobierno de Salvador Allende, y señaló que él tenía familiares en el partido Comunista y en Patria Libertad. Luego que dijo estas dos palabras, los militantes de la UDI saltaron de sus asientos, se pararon y ovacionaron a Patria y Libertad, ante la mirada complicada de algunos altos dirigentes de este partido y el silencio de Golborne.
De hecho, el propio presidente del partido, Patricio Melero, defendió los aplausos. "Esas personas lo hicieron a rostro abierto y de cara al público, no encapuchados", afirmó el diputado tras participar en una reunión del comité político en La Moneda.
"No me incomoda nunca una persona que da la cara en la opinión que vierte. Me incomoda cuando se hace a espaldas o poniéndose una capucha en el rostro. Eso es lo que hay que aislar", sentenció el parlamentario.
Un legado que incomoda
Sin embargo, los aplausos incomodaron a varios de los integrantes del partido, que han tomado distancia del pasado anterior tras el regreso a la democracia.
Y no solo a ellos molestó sino también a otras figuras políticas. Es el caso del ex canciller Juan Gabriel Valdés quien aseguró que "la UDI siempre tiene un fondo oscuro, hay una tentación autoritaria en su identidad y que naturalmente en el mundo de la derecha hay algunos de sus partidarios que tienen nostalgia por los movimientos de carácter fascista".
En diálogo con Cambio21 agregó que "así que no me llama la atención esta actitud, y menos el pinochetismo el cual está instalado en los dos partidos de derecha (UDI y RN)".
"Patria y Libertad fue un movimiento fascista, vinculado en forma siniestra a admiradores del régimen nazi", afirmó Valdés.
Por último se refirió al apoyo de Melero asegurando que "debería haber una diferencia, pero no es capaz de hacerlo, no es capaz de entender que no puede apoyar a un grupo que estuvo vinculado con sabotajes y actividades fascistas".
Por su parte, la diputada Adriana Muñoz indicó que "los mismos que aplaudieron durante el acto de Golborne, son los mismos que apoyaron a la dictadura".
En esa línea agregó a Cambio21 que "hasta el día de su muerte apoyaron a Pinochet, y que hoy día siguen apoyando a los candidatos de la UDI y de derecha".
"Fue un brazo formado por los personeros de más de derecha de la época. Mi opinión hacia ellos es negativa: de Patria y Libertad y de todos esos grupos que fomentaron la violencia", aseguró la parlamentaria.
Por último habló sobre Melero asegurando que "el diputado ha hecho un gesto nostálgico, no nos olvidemos que junto a Longueira estuvieron unidos a Pinochet".
El grupo Patria y Libertad
Pero. ¿de qué se trató este movimiento y quienes fueron sus integrantes? El Frente Nacionalista Patria y Libertad fue un movimiento paramilitar de ideología nacionalista. Se formó en 1971 para oponerse al gobierno de Salvador Allende. Realizó actividades políticas de activismo y proselitismo, principalmente entre la juventud, y posteriormente, ya en la clandestinidad, luego del intento de Golpe de Estado del 29 de junio de 1973, conocido como el Tancazo, optando por la vía armada, el terrorismo y el sabotaje, para intentar derrocar al gobierno de la Unidad Popular.
Su origen se remonta a 1970, cuando el abogado Pablo Rodríguez Grez (actual profesor de Derecho Civil y decano de la Universidad del Desarrollo) formó el Comité Cívico Patria y Libertad para impedir la elección de Allende en el Congreso, el cual dio origen al movimiento que se opondría al gobierno de Salvador Allende hasta su disolución en 1973 tras el golpe de Estado.
En 1972 el grupo realizó una operación de internación de armas desde Argentina, a cargo de Roberto Thieme, el cual logró ingresar alrededor de 100 fusiles de asalto, destinados a ser utilizados en acciones de sabotaje.
En marzo de 1973, un grupo de Patria y Libertad del cual formaba parte el ex agente de la DINA Michael Townley, (que asesinó al canciller Letelier y a Carlos Prtas y su esposa) llevó a cabo una operación destinada a desactivar un aparato que el gobierno había instalado para interferir las transmisiones del Canal 5 de Concepción, dependiente de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Los hechos culminaron con la muerte del obrero José Tomás Henríquez. La responsabilidad moral se le adjudicó al sacerdote Raúl Hasbún, director ejecutivo de la estación televisiva.
Tras el golpe militar del 11 de septiembre de 1973, el movimiento se disolvió. Algunos de sus miembros, individualmente, han admitido haber participado, con posterioridad a la disolución oficial del movimiento, el 13 de septiembre de 1973, en las violaciones a los derechos humanos que se cometieron entre 1973 y 1990, durante el Régimen Militar de Augusto Pinochet. Muchos de los ex militantes de Patria y Libertad, se incorporaron a las policias secretas de Pinochet, la DINA y posteriormente la CNI.
Entre los años 2003 y 2005 ha hecho noticia por detenciones de ex militantes acusados de violaciones a los derechos humanos y el 2006 por las declaraciones del ex dirigente Roberto Thieme quien confesó haber recibido presiones para atentar contra la vida del Senador Carlos Altamirano durante el año 1973.
Durante el acto, el candidato no previó que muchos militantes de la UDI son admiradores y seguidores de ese grupo político que participó en acciones delictivas y terroristas durante el gobierno de Salvador Allende, y señaló que él tenía familiares en el partido Comunista y en Patria Libertad. Luego que dijo estas dos palabras, los militantes de la UDI saltaron de sus asientos, se pararon y ovacionaron a Patria y Libertad, ante la mirada complicada de algunos altos dirigentes de este partido y el silencio de Golborne.
De hecho, el propio presidente del partido, Patricio Melero, defendió los aplausos. "Esas personas lo hicieron a rostro abierto y de cara al público, no encapuchados", afirmó el diputado tras participar en una reunión del comité político en La Moneda.
"No me incomoda nunca una persona que da la cara en la opinión que vierte. Me incomoda cuando se hace a espaldas o poniéndose una capucha en el rostro. Eso es lo que hay que aislar", sentenció el parlamentario.
Un legado que incomoda
Sin embargo, los aplausos incomodaron a varios de los integrantes del partido, que han tomado distancia del pasado anterior tras el regreso a la democracia.
Y no solo a ellos molestó sino también a otras figuras políticas. Es el caso del ex canciller Juan Gabriel Valdés quien aseguró que "la UDI siempre tiene un fondo oscuro, hay una tentación autoritaria en su identidad y que naturalmente en el mundo de la derecha hay algunos de sus partidarios que tienen nostalgia por los movimientos de carácter fascista".
En diálogo con Cambio21 agregó que "así que no me llama la atención esta actitud, y menos el pinochetismo el cual está instalado en los dos partidos de derecha (UDI y RN)".
"Patria y Libertad fue un movimiento fascista, vinculado en forma siniestra a admiradores del régimen nazi", afirmó Valdés.
Por último se refirió al apoyo de Melero asegurando que "debería haber una diferencia, pero no es capaz de hacerlo, no es capaz de entender que no puede apoyar a un grupo que estuvo vinculado con sabotajes y actividades fascistas".
Por su parte, la diputada Adriana Muñoz indicó que "los mismos que aplaudieron durante el acto de Golborne, son los mismos que apoyaron a la dictadura".
En esa línea agregó a Cambio21 que "hasta el día de su muerte apoyaron a Pinochet, y que hoy día siguen apoyando a los candidatos de la UDI y de derecha".
"Fue un brazo formado por los personeros de más de derecha de la época. Mi opinión hacia ellos es negativa: de Patria y Libertad y de todos esos grupos que fomentaron la violencia", aseguró la parlamentaria.
Por último habló sobre Melero asegurando que "el diputado ha hecho un gesto nostálgico, no nos olvidemos que junto a Longueira estuvieron unidos a Pinochet".
El grupo Patria y Libertad
Pero. ¿de qué se trató este movimiento y quienes fueron sus integrantes? El Frente Nacionalista Patria y Libertad fue un movimiento paramilitar de ideología nacionalista. Se formó en 1971 para oponerse al gobierno de Salvador Allende. Realizó actividades políticas de activismo y proselitismo, principalmente entre la juventud, y posteriormente, ya en la clandestinidad, luego del intento de Golpe de Estado del 29 de junio de 1973, conocido como el Tancazo, optando por la vía armada, el terrorismo y el sabotaje, para intentar derrocar al gobierno de la Unidad Popular.
Su origen se remonta a 1970, cuando el abogado Pablo Rodríguez Grez (actual profesor de Derecho Civil y decano de la Universidad del Desarrollo) formó el Comité Cívico Patria y Libertad para impedir la elección de Allende en el Congreso, el cual dio origen al movimiento que se opondría al gobierno de Salvador Allende hasta su disolución en 1973 tras el golpe de Estado.
En 1972 el grupo realizó una operación de internación de armas desde Argentina, a cargo de Roberto Thieme, el cual logró ingresar alrededor de 100 fusiles de asalto, destinados a ser utilizados en acciones de sabotaje.
En marzo de 1973, un grupo de Patria y Libertad del cual formaba parte el ex agente de la DINA Michael Townley, (que asesinó al canciller Letelier y a Carlos Prtas y su esposa) llevó a cabo una operación destinada a desactivar un aparato que el gobierno había instalado para interferir las transmisiones del Canal 5 de Concepción, dependiente de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Los hechos culminaron con la muerte del obrero José Tomás Henríquez. La responsabilidad moral se le adjudicó al sacerdote Raúl Hasbún, director ejecutivo de la estación televisiva.
Tras el golpe militar del 11 de septiembre de 1973, el movimiento se disolvió. Algunos de sus miembros, individualmente, han admitido haber participado, con posterioridad a la disolución oficial del movimiento, el 13 de septiembre de 1973, en las violaciones a los derechos humanos que se cometieron entre 1973 y 1990, durante el Régimen Militar de Augusto Pinochet. Muchos de los ex militantes de Patria y Libertad, se incorporaron a las policias secretas de Pinochet, la DINA y posteriormente la CNI.
Entre los años 2003 y 2005 ha hecho noticia por detenciones de ex militantes acusados de violaciones a los derechos humanos y el 2006 por las declaraciones del ex dirigente Roberto Thieme quien confesó haber recibido presiones para atentar contra la vida del Senador Carlos Altamirano durante el año 1973.
No hay comentarios:
Publicar un comentario