Domingo 18 de Septiembre 2022
Manuel Humberto Ahumada Lillo
Pulso Sindical Diario
de la CGT Chile
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canta Carlos Gardel
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ESTIMADOS COMPAÑEROS(AS) Y AMIGOS(AS) DE NUESTRA ORGANIZACIÓN Y LECTORES DEL PULSO SINDICAL:
EL COMITÉ EJECUTIVO ME HA SOLICITADO DAR CUENTA QUE ESTEBAN HIDALGO SALAS HA PRESENTADO SU RENUNCIA VOLUNTARIA E INDECLINABLE AL CARGO DE DIRIGENTE NACIONAL Y DE FUNCIONARIO DE LA CGT, AL 30 DE SEPTIEMBRE DE ESTE AÑO.
SIN EMBARGO, PARA LOS EFECTOS DE FUNCIONAMIENTO INTERNO, CONTACTOS Y DEMÁS GESTIONES DE LA CGT, ESTEBAN HIDALGO NO TIENE VÍNCULO NI RESPONSABILIDAD ALGUNA A CONTAR DEL 15 DE SEPTIEMBRE Y SOLO ESTÁ VINIENDO EN CONTADOS ESPACIOS ACORDADOS, PARA HACER ENTREGA DE SUS RESPONSABILIDADES.
MUCHO AGRADECERÍAMOS AYUDARNOS EN LA DIFUSIÓN DE ESTA INFORMACIÓN EN DONDE CREAN CONVENIENTE HACERLO.
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1.- Hace ya muchos, años el inicio de la primavera que se entronca con la celebración de las fiestas patrias, era algo especial y muy esperado por los niños y niñas. Era el momento en que los padres - luego de sacar muchas cuentas para ordenar sus deudas que claramente eran siempre mayores a sus ingresos - compraban alguna ropita nueva que a veces estaba acompañada de zapatos o zapatillas. Lamentablemente no pasaban muchas horas y ya la pinta dieciochera estaba algo arruinada de tanto jugar en la tierra o arrastrarse por el pasto. Y es que correr detrás de los volantines que iban sin rumbo fijo después de resultar derrotados en una comisión era una aventura que no podía soslayarse, aún a costa de estropicios al vestuario y el calzado.
Esos días eran inolvidables, estábamos de vacaciones de fiestas patrias, aparecían los trompos y las taguas, se recorrían algunas cuadras a la redonda de la casa jugando a las bolitas, ya sea la troya o la hachita y cuarta.
El emboque era competencia de expertos y los más osados se entretenían jugando al tombo y el caballito bronce. Todo era juego y diversión, después de varios meses de frío, lluvia y barro.
Por esos tiempos no había aparatos móviles a los que estar atados. Era todo juego en casa o en la calle luego de cumplir las pequeñas obligaciones que nos ponía la madre, como ayudar en el aseo de la casa y hacer la cama. Ni siquiera había televisión en todas los hogares de manera que la variedad de juegos manuales y colectivos llenaban todo el tiempo.
2.- En muchos pasajes de los barrios, los vecinos se organizaban para embanderar, hacían una once para todos los niños en la calle, era común las carreras de 3 pies o la de ensacados, también la gymkana y la carrera con la cuchara en la boca llevando un huevo generaban explosiones de gritos y risas. Luego todos compartimos un vaso de jugo o bebida y nunca faltaba la empanada y el vaso de chicha o vino para los padres que disfrutaban viendo a sus retoños y a veces también competían sacándose las penas y rabias en un ambiente de camaradería vecinal que hoy se extraña.
¿Quien no participó del proceso de curar hilo para enrollarlo luego en un ovillo, que poco a poco fue siendo reemplazado por el carrete de madera o metálico? Ya fuera en la cancha de la población o en los sitios baldíos que nunca escaseaban, se juntaban los grupos para competir en las comisiones a las que se llegaba con los mejores volantines.
En muchas poblaciones se paraban fondas a las que concurría el vecindario sin pagar entrada, más de una vez se bebía en exceso y no faltaban las peleas.
Sin embargo era distinto, no estábamos llenos de balazos ni de agresiones a mansalva y sin razón aparente, no era tan marcado y extendido el tráfico de drogas y el sicariato ni siquiera se nombraba.
Es cierto, la vida sigue y va mutando pero es necesario reconocer que en algunos casos la modernidad ha matado la fraternidad, el individualismo pampea y qué decir de la aberración consumista que castiga casi por igual a todos. Tener, acumular, ostentar son valores negativos cuando matan la cercanía y lesionan la amistad. Ojalá y seamos capaces de revertirlo antes de que acabe con nosotros. Es lo que quiere el capital individuos preocupados de ellos mismos, poco solidarios y desinteresados del bien colectivo. Hay que trabajar para no darles en el gusto.
Volvamos a la vida del barrio, a la felicidad de antaño.
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Nuestra fuerza la Unidad
Nuestra meta la Victoria
Video. de
tangonostalgias
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