La cinta retrata la íntima relación de trabajo entre Alfredo (48) y Paulina (49), dos amigos y cineastas que, a través del cine de ficción, intentan reconstruir la memoria de sus padres, quienes forjaron una profunda amistad hace 45 años, cuando compartieron una celda en Villa Grimaldi. En esta entrevista a dos voces, el director Roberto Baeza explica que la película "trata de hablar de qué nos pasó y cómo eso se hereda", a través de "unas emociones que le dan carne a lo que hemos vivido", en palabras de Paulina Costa. "Estamos muy acostumbrados a ver a los desaparecidos como cifras, a los torturados como (parte de) informes, y por tabú muchos hemos dejado de hablar de esta historia que nos pertenece desde el punto de vista familiar", expresa la productora. "Muchas veces nos encontramos con un rechazo a hablar de estos temas porque supuestamente los hemos hablado un montón, pero en el seno de las familias, donde estas historias dejaron huella, esas cosas no se han hablado lo suficiente. Sabemos qué pasó, ¿pero cómo sobrevivimos a eso? ¿Cómo nos marca hasta hoy? ¿Qué huellas dejan en nuestra sicología, en nuestra manera de enfrentar la vida? Tenemos que enfrentar lo que nos duele para salir adelante", subraya. El filme se estrena el próximo jueves 20 de abril.
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