Por: Daniel Lillo | Publicado: 01.08.2022
Grupo de cristianos emitió una declaración titulada “¿Por qué aprobamos?” | Agencia UnoLa carta fue apoyada por 450 personas vinculadas al mundo cristiano, entre ellos diversas figuras ligadas a la política y el espacio religioso que toman partido de cara al Plebiscito.
En una declaración titulada “¿Por qué aprobamos?”, un grupo de miembros de distintas iglesias cristianas, se cuadraron con la propuesta de la Nueva Constitución, llamando al mundo religioso a aprobar el texto el próximo 4 de septiembre.
“Como grupo de cristianas y cristianos autoconvocados, acogemos y agradecemos el trabajo de la Convención Constitucional que nos ofrece una propuesta de texto que invita a soñar un Chile más solidario e inclusivo”, comienza exponiendo la carta.
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La misiva ya cuenta con el apoyo de más de 450 personas, entre las que destacan el rector de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UACH), Álvaro Ramis; los senadores Yasna Provoste (DC) y Juan Ignacio Latorre (RD); la exministra Laura Albornoz; y por la diputada Mercedes Bulnes (FA).
Uno de los aspectos que rescata la misiva, es el enfoque en la solidaridad y derechos humanos que contiene la propuesta de Nueva Constitución, valores que profesan desde el mundo del cristianismo.
“El concepto de solidaridad se repite 26 veces a lo largo del texto. Y aún más; el primer artículo termina diciendo que la protección y garantía de los derechos humanos individuales y colectivos son el fundamento del Estado y orientan toda su actividad”, se lee en la carta.
En esta misma línea, la agrupación sostiene que “desde la fe que profesamos no somos indiferentes a los valores que sustentan esta propuesta. No podemos serlo si queremos ser fieles a las enseñanzas de Jesús, el Cristo. Ese Cristo que nos dejó el imperativo de amar al prójimo sin importar quien sea; el Cristo que hizo de los pobres y otros rostros, sus predilectos. Usando el lenguaje de la propuesta de nueva constitución; vino a revelarse a los históricamente excluidos”.
«Como cristianas y cristianos tenemos un férreo compromiso con la dignidad de la persona humana en todas las etapas de la vida. Así, valoramos encarecidamente que tengamos una Constitución ecológica que asuma el llamado del cuidado de la casa común en la cual siguen siendo los más pobres y sus comunidades los principales perjudicados y quienes ya no pueden seguir esperando. Como tampoco puede esperar más la quebrada relación del Estado con los pueblos originarios que habitan estos territorios ancestralmente. Y por sobre todo, agradecemos la posibilidad de basar esta propuesta en la garantía de los derechos sociales básicos para alcanzar una vida digna, que nos parece que es la vía correcta.», concluye la declaración.
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