Vistas de página en total

martes, 27 de marzo de 2012

Chile está perdiendo la decencia y algo más…



Ministerio Evangélico Misionero


¡Ay de los que dictan leyes injustas, y prescriben tiranía, para apartar del juicio a los pobres, y para quitar el derecho a los afligidos de mi pueblo; para despojar a las viudas, y robar a los huérfanos! Isaías 10:1 y 2




La semana recién pasada hemos conocido de varios hechos y circunstancias que nos hacen afirmar, con gran dolor aunque no sin esperanza de revertir aquello, que Chile está perdiendo completamente su decencia y algo más, lo que claramente es, por un lado una afrenta a nuestra historia y a quienes han forjado nuestra nación y, por otro, un camino disolutorio de muy peligrosas consecuencia para nuestras generaciones jóvenes.


Sorprendente ha sido la reacción mediática de algunas autoridades de gobierno, arrastradas por las acciones ideológicas y propagandísticas de los siempre bien financiados Rolando Jiménez y su movilh (qué decir de los canales de televisión y sus programas de tele-basura –desde los noticieros a los realities- siempre dispuestos a promover la degeneración de moda y a avalar cualquier aberración so pretexto de “igualdad”; al respecto sólo queda repetir las palabras de aquel famoso tanguero Enrique Santos di Cepollo en su famoso “Cambalache”: “Los inmorales nos han igualado” ) por la golpiza sufrida por aquel joven homosexual que hoy lo tiene al borde de la muerte (y oramos para que se arrepienta, porque la paga del pecado es muerte) de la cual responsabilizaron, en un primer momento y muy intencionadamente a supuestos grupos Neo Nazis, para tener la excusa de alegar y buscar apoyos en favor de una ley contra la discriminación, pero a poco andar y tras la detención de los supuestos implicados, todo ellos con un amplio prontuario policial, quedó casi inmediatamente desvirtuada la posible vinculación de éstos con aquellos grupos (los nazis son de muy fácil identificación por sus ropas y apariencia física y éstos perecían que venían recién saliendo de los bajos fondos) pero la propaganda sistemática y política comunicacional del movilh a favor de legalizar el pecado y las aberraciones sexuales ya estaba en movimiento y el propio ministro del interior no tardó en caer en aquel jueguito para anunciar “urgencia” al homosexual proyecto de medidas contra la discriminación. Somos categóricos en rechazar la violencia de la cual ese joven fue víctima, porque como cristianos siempre estaremos a favor de la vida pero ello no puede llevarnos a equívocos (curioso es que quienes más defienden la vida de éste joven y rechazan la violencia de la que fue víctima, sean los mismos que propician una ley de aborto para asesinar a los no nacidos y más indefensos e inocentes seres humanos, es decir, en éste caso si se puede ejercer violencia asesina y ser justificado el asesinato…) ¿Por qué habría de hacerse una ley o legalizarse las aberraciones sexuales por lo sucedido a aquel joven? Nuestro código penal ya establece el tipo penal y su reproche jurídico con sus penas respectivas y a los supuestos implicados les corre la posibilidad de recibir hasta presidio perpetuo calificado, pena que parece bastante ajustada al crimen por lo alevoso del mismo, pero si fuera por hacer una ley por cada persona que sufre una agresión similar, habría que promover una decena de leyes por día, especialmente los fines de semana de los cuales las crónicas rojas dan constantemente cuenta de pendencias, riñas y homicidios. Para nadie es desconocido que el delictual bajo mundo del hampa o barrios rojos en el cual se mueven la droga, el alcohol, la violencia, los homosexuales y travestis son permanentemente sujetos u objetos de páginas rojas en los noticieros de manera de que no se entiende la razón de tanta parafernalia mediática por lo sucedido a este joven ( que a sus 22 años ni siquiera había completado su educación media), lo cual reiteramos, rechazamos absolutamente y abogando por su recuperación y arrepentimiento si ello es posible, excepto claro porque supuestamente fueron neo-nazis los hechores y ello ha servido de tribuna para que Jiménez y los homosexuales “usen” y “abusen” del drama de aquel joven para buscar legalizar sus propias aberraciones sexuales. Más de alguien dirá que nosotros estamos exagerando pero yo pregunto, ¿Cómo se explica entonces que Jiménez haya salido diciendo que es necesario legalizar la pedofilia agregando que es “necesario que se traten estos temas como algo normal y natural”? (declaraciones hechas en el marco del caso en que un homosexual, mayor de edad, mantuvo relaciones sexuales sodomíticas con un adolescente de 14 años en el Instituto Nacional de Santiago mientras otros los gravaban. Para conocer más en detalle de ésta noticia y sobre el particular, pinche en el siguiente link: http://www.movilh.cl/index.php?option=com_content&task=view&id=1305&Itemid=1). Somos muy categóricos al afirmar que Jiménez está usando este dramático hecho para sus inmorales fines y, peor aún, los medios de comunicaciones masivos, intensamente farandulizados y permeados por la agenda gay con muchos homosexuales presentes al interior de ellos, han sabido posicionar aquel discurso de victimización, arrastrando a esos medios a ser verdaderos voceros de esas inmoralidades (que aunque sean financiados por capitales privados, son concesiones que el estado entrega, por ende son públicos) y peor aún, al mismo gobierno, en la persona del Ministro del Interior, rápidamente se hizo eco de esas inmorales demandas y estuvo muy pronto para anunciar la urgencia del ejecutivo a dicho proyecto, camino que también han seguido varios personeros de RN, especialmente el senador Espina… No cabe duda, Chile está perdiendo la decencia.La semana recién pasada comenzó en el Senado la discusión sobre la idea de legislar o no sobre el Aborto (discusión que continuará el próximo martes 03 de abril) y aunque se ha pretendido esconder la verdadera intencionalidad dicho proyecto tiene, el ABORTO LIBRE, con eufemismos tales como “Aborto terapéutico” o en caso de riesgo de salud de la madre o inviabilidad del “feto”, los pseudo progresistas nazis eugenésicos y sobre ideologizados que abogaban por asesinar a los no nacidos que ellos consideran “vidas” de segunda categoría, “vidas” indignas de ser vividas y por tanto, menos seres humanos que los nacidos, no han tenido argumentos de peso y difícilmente podrán tenerlos, para tratar de convencer a los siempre variables demócratas cristianos (al menos en ésta oportunidad, pareciera que la mayoría de ellos está por honrar la supuesta condición de “cristiano” de su partido). Los autodenominados senadores progresistas (PS, PPD, PRSD y MAS) por más que trataron de justificar el asesinato de los no nacidos durante el debate en el senado, como verdaderos malabaristas ideológicos sólo pudieron argüir que el Aborto terapéutico existió en Chile desee 1931 y hasta 1989 cuando el Almirante Merino y la Junta de gobierno modificó el artículo 119 del Código Sanitario derogando la posibilidad de seguir realizando lo que para los progresista era totalmente normal y bueno hacer (para mayor información de cómo era el tema del Aborto en la Unidad Popular y la experiencia del Hospital Barros Luco, lea el artículo de archivo del periódico The Clinic “La Vía Chilena hacia el Aborto” en el siguiente link: http://www.theclinic.cl/2012/03/13/la-via-chilena/ ). Más allá de lo espurio de aquella modificación legal, ello en nada la legítima o transforma en algo esencialmente bueno o deseable sino muy por el contrario; ontológicamente quitarle la vida a ser humano más inocente e indefenso es a todas luces perverso; pero siguiendo ese racionamiento, y además de ir en contra de toda el Arte Médico y del mismísimo juramento Hipócratico, no se entiende por qué ellos no proponen que se reponga la pena de muerte para los delitos más graves como el que se comentó más arriba siendo que la misma constitución contempla dicha posibilidad (el doble estándar de la clase política queda de manifiesto una vez más). Por otro lado, de haber estado vigente dicha disposición que permitía el “Aborto” o la misma pena de muerte, sin lugar a dudas hubiésemos sido nosotros los que bogamos por la Vida y la Familia y en virtud de nuestros fundamentos y principios, los primeros en resistir tales leyes y/o prácticas, de manera que argumentar que es bueno hacer una ley de Aborto sólo por el hecho de que antes fue legal, resulta algo más que insensato y muy sobre ideologizado; que decir sobre las supuestas hipótesis de riesgo de salud de la madre o la inviabilidad fetal… nada más que verborrea insustancial: las estadísticas son claras y ponen a Chile en el lugar más bajo de mortalidad de mujeres por parto y en casos muy particulares de peligro de vida de la madre, los protocolos médicos responden muy bien a cada uno de ellos tanto es así que al presente no existe ningún facultativo en prisión por desarrollar una acción en pro de la vida de la madre y que nadie se atrevería a calificarla de aborto aunque ello significara el deceso del neo nato; en el caso de “inviabilidad fetal” y sin interés de redundar en tal falaz argumento esgrimido por los médicos concertacionistas, me remito a lo expresado en el Diario La Tercera de ayer domingo http://www.latercera.com/noticia/opinion/editorial/2012/03/894-439720-9-uso-de-lenguaje-equivoco-en-debate-sobre-el-aborto.shtml ), opinión que nos interpreta absolutamente. Por catastrófico que suene, Chile está perdiendo la decencia.La semana pasada también conocimos de la condena por “discriminación” que hiciera la Corte Interamericana de Derechos Humanos al Estado Chileno por el caso de las lesbianas Karen Atala y Ema de Ramón, lo que sólo viene a reafirmar lo que hemos venido sosteniendo por largos años: los grupúsculos homosexuales chilenos, que no representan ni el 2% de la población chilena, cuentan no solo con financiamiento internacional sino también con apoyo político de las organizaciones internacionales masónicas representadas en la ONU y OEA. Estas mismas, que enarbolan la bandera de los Derechos Humanos, son las mismas que propician e incitan a las naciones a legalizar el Aborto, es decir y según ellos, el no nacido no sería un ser humano y por tanto no es titular de ningún derecho, no obstante de que nuestra Constitución establece en su artículo 19 expresamente que “La Constitución asegura a todas las personas: 1°. El derecho a la vida y a la integridad física y psíquica de la persona. La ley protege la vida del que está por nacer. La misma Corte que ha condenado a Chile ha manifestado que también es “discriminación” el hecho de que las mujeres cuando se hacen un tratamiento (nombre que usan para referirse al ABORTO) es perseguida penalmente pero el hombre no sufre ninguna pena o prisión por algún “tratamiento” que éste se haga y por tanto, insisten en dicha corte, que los países como Chile deben despenalizar el Aborto en virtud de los supuestos derechos reproductivos y sexuales que las mujeres tendrían y contra la “discriminación”. Esa misma corte que declara que no legalizar el Aborto es “discriminación” es la misma que hoy condena a Chile por “discriminar” a las lesbianas Atala y de Ramón. Claramente existe una colisión de legislaciones y de derechos. Por otro lado, cualquier estudiante de derecho desde el primer año de la carrera sabe que la ley es, según reza el artículo 1 del Código Civil: “la declaración de voluntad soberana que, manifestada en la forma prescrita por la Constitución, manda, prohíbe o permite” y es la propia Constitución Política de la República la que establece expresamente en su artículo 5 inciso 1 que: “La soberanía reside esencialmente en la Nación. Su ejercicio se realiza por el pueblo a través del plebiscito y de elecciones periódicas y, también, por las autoridades que esta Constitución establece. Ningún sector del pueblo ni individuo alguno puede atribuirse su ejercicio”, y a su vez el artículo 1 inciso 5 señala de la misma establece que: “Es deber del Estado resguardar la seguridad nacional, dar protección a la población y a la familia, propender al fortalecimiento de ésta, promover la integración armónica de todos los sectores de la Nación y asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional”. Más de algún entendido en la materia dirá que ese mismo artículo establece que la Soberanía tiene como límite el ejercicio de los Derechos esenciales de las personas y aunque ello suene muy bonito, hoy quieren hacernos creer que la degeneración es un derecho y que todos tienen derecho a ser degenerados y pervertidos y que ello sería un derecho humano, sin embargo, no dicen lo mismo respecto del derecho humano más básico de todos: el derecho a la Vida de los miles de no nacidos que son asesinados día a día con el beneplácito y financiamiento de esas organizaciones. No obstante todo lo anterior, el fallo ideológico de aquella corte no sólo “obliga” a Chile pagar una indemnización de varios millones a las lesbianas por la supuesta “discriminación” sino que las verdaderas víctimas de las aberraciones sexuales de Atala, sus hijas, no sólo no fueron oídas jamás en el transcurso del juicio sino que se les quiere privar de vivir en el seno de una familia normal, sana y decente para convivir con dos mamás…. Qué duda cabe, Chile está perdiendo la decencia. Ante tal situación, el padre de las ahora adolescentes y ex marido de la jueza Atala, hizo pública una carta en donde plantea las inconsistencias de dicho fallo y sus reparos respecto del mismo no sólo como padre sino también como abogado (carta que puede leer in extenso al hacer pinchar aquí http://blogs.elmercurio.com/columnasycartas/2012/03/21/caso-atala-2.asp ). No podríamos menos que solidarizar con aquel padre de familia, que como todo buen padre familia sólo anhela lo mejor para sus hijos, máxime cuando el Tribunal de Familia, la Corte de Apelaciones y hasta la mismísima Corte Suprema, máximo tribunal de nuestro país que se reputa de una República Soberana, ya se habían pronunciado en favor de éste y por el interés superior de los niños, pero vino este fallo que no hace sólo revertir los dictámenes que los órganos soberano de la nación emitieron lesionando gravemente nuestra dignidad y soberanía nacional (soberanía es aquel poder que no admite ningún otro poder igual ni superior a él mismo) sino que literalmente nuestro país está perdiendo la decencia y algo más…su soberanía. Triste es constatar el desánimo y desesperanza de muchos como éste padre o de uno de aquellos que comentaron dicha carta, el que ya falto de todo asombro y como esperando cada día cosas peores sin admirarse de nada, porque parece que nuestro país ya ha decidido seguir el consejo de las naciones y de los pseudo progresistas que promueven la Agenda Gay, el aborto, la eutanasia y toda clase de abominaciones anti Vida y anti Familia, pregunta de una manera muy figurativa a ese padre, y por su intermedio a todo Chile: ¿Alguna vez pensó que la decencia podía ganar? Lapidaria la afirmación en forma de pregunta e insistimos…Chile está perdiendo la decencia y algo más: su soberanía. Pareciera que pocos son los que advierten tan peligroso tránsito y lo único que queda muy claro en éste entramado de hechos es que el gran objetivo del homosexual proyecto contra la discriminación, avalado por las masónicas organizaciones mencionadas, los medios de comunicaciones masivos y su tele basura, personeros de gobierno y, por supuesto, los auto proclamados progresistas, no es más que “discriminar a los Heterosexuales, a las familias, padres y gente decente” que buscan el interés superior de los niños y que éstos se desarrollen en un ambiente saludable y de proyecciones para ser un verdadero aporte a la sociedad.Chile está perdiendo la decencia y algo más… y cada uno de estos acontecimientos: la promoción de la Agenda Gay y su proyecto de ley contra la discriminación usando como excusa la golpiza de aquel joven, la condena a Chile por discriminación por parte de la Corte Interamericana y la discusión de legalizar el Aborto en el senado parecieran decir que no sólo es así sino que ya no hay nada que hacer al respecto, pero nosotros somos gente de esperanza y de fe que trabajaremos incansablemente para impedir que la degeneración de apodere de nuestra país y que nuestros hijos y nietos tengan que padecer una nueva Sodoma y Gomorra. Aunque a muchos no les guste, somos la reserva moral de nuestra nación y jamás callaremos. Esto no es un problema ideológico, de liberalismo y conservadores, no es sólo un problema de salud pública o religioso, es un problema moral y ético transversal a toda nuestra sociedad. Por más que quieran marginarnos del debate, no haremos silencio cómplice a todas esas aberraciones porque somos una voz profética para Chile y seguiremos denunciando el pecado y todo aquello que atente contra la Vida y la Familia, a todo lo que atente contra lo creado por Dios y establecido en su Santa Palabra. “Y derramaron la sangre inocente, la sangre de sus hijos y de sus hijas, Que ofrecieron en sacrificio a los ídolos de Canaán, Y la tierra fue contaminada con sangre”. Salmo 106:38




Dios les guarde


Pastor José Lema


Federación de Entidades Religiosas de Chile FERCHILE


En defensa de la Vida y la Familia



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores