Por: Marcos Rodriguez
Gonzalez, Reportero AFDD.
La mañana de este sábado 25
de agosto en la Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi ubicada en av.
Jose Arrieta N° 8401, Peñalolén.
Se realizó el lanzamiento
del libro “La danza de los cuervos” del Periodista Javier Rebolledo, la
presentación estuvo a cargo del Periodista Juan Pablo Cárdenas, Director de
Radio Universidad de Chile, del Abogado de derechos Humanos Nelson Guillermo
Caucoto Pereira y de Carmen Gloria Díaz, especialista en derechos Humanos.
Palabras del abogado Nelson
Guillermo Caucoto Pereira.
Tengo el honor de participar
de este segundo lanzamiento del libro de Javier Rebolledo, lo hicimos antes en
la Universidad de Chile y me llamó la atención la cantidad de público que
asistió en esa oportunidad y hoy también me llama la atención el público
presente.
Hay tanta historia que aun
tenemos que conocer y tanto relato oculto , hay tantos girones de nuestra
memoria histórica que tienen que salir a la luz; yo decía en esa primera
oportunidad lo que a hecho Javier es una tremenda contribución para esta
memoria histórica y esta viene hacer un contrapelo, un elemento de contención
para preguntarnos nosotros mismos y preguntarles a las instituciones, a las
autoridades y a los chilenos en general, a la prensa, a los tribunales, a las iglesias
que hicimos ayer porque de acuerdo de lo que hicimos ayer, vamos a tener la autoridad moral para
formularnos frente a la sociedad del futuro y esto está esencialmente vinculado
al tema de la gobernabilidad futura, no creo que podamos construir democracia
con bases solidas, si estos crímenes no son descubiertos y sancionados en la
dimensión en que tienen que ser sancionados hoy en nuestro país y digámoslo
abiertamente hasta el año pasado se da una cierta corriente en nuestro máximo
tribunal, que aplicaba penas ínfimas, que son desproporcionadas a la
envergadura del delito que se cometió, yo no puedo olvidar a estos 15
compañeros en el Cerro Chena, 11 de ellos trabajadores de la maestranza de San
Bernardo, donde se les aplicó una condena de tres años y un día al autor de
esos 15 crímenes eso es una burla, eso es inaceptable no se puede aceptar que
por 15 crímenes horrendo con tortura, se condene a un agente del estado a tres
años y un día y que ese sujeto esté hoy en su casa; gozando de una inmerecida
libertad y quiero decir esto, al que no le guste, es un tipo muy humilde
quitado de bulla, muy trabajador, yo creo que engalana esta presentación el
ministro Alejandro Solís, el ministro es el que ha sabido conocer de estos
inmensos dolores y sufrimiento que ha convivido con ellos a diario, yo creo que
tiene una inmensa cantidad de trabajo que le es imposible resolver todo, todos esperamos
que el ministro nos resuelva todos los casos, pero es una tarea titánica para
un ser humano y mientras el aplica condenas de 15 años promedio, no podemos
llegar a condenas de tres años mandando a la gente a sus casas; digamos un
contraluz en la tarea de un juez, que entiende la problemática, entiende los
sufrimientos, los dolores que hay detrás de esos procesos, con este justo
castigo, si a mi me encanta esa suerte de slogan de los familiares ese “no queremos
venganza, queremos justicia y verdad”, conocer lo que pasó, queremos también la
reparación, porque esta implícita en el concepto de justicia, pero también
queremos la sanción penal para revalorizar lo que ayer despreciamos, ayer la
vida, la libertad, la seguridad de las personas no valió absolutamente nada y
una manera de revalorizarla, es a una sentencia que estén acorde como dice la
constitución, que sean proporcionales y racionales a la gravedad del delito,
que se cometió, creo entrar con estas palabras al libro, es una narración que a
mi me llamó la atención; un libro que se lee de un tirón, que agarra que uno lo
lee y uno se da cuenta.
A esta dimensión pudo llegar
la maldad humana y decir en esto, podemos reconocernos nosotros los chilenos, a
otros semejantes agentes del estado; cuya misión fundamental y fundacionales,
custodiar los intereses de la gente para que ellos nos hagan desaparecer, los
maten, los torturen, los martiricen como lo hicieron con estas victimas, es
decir, es imposible aceptar tanto dolor, sufrimiento y es imposible imaginar
que un ser humano puede imaginar ese dolor, en otro semejante a mi, he vivido
toda mi vida en medio de estos dolores, conozco muchos de los desaparecidos sin
haberlos vistos nunca, los conozco a través de sus familiares y uno los va
conociendo, los va queriendo, sabe y empatiza y se coloca en el lugar de ellos
y uno no puede olvidar que a esa gente, que llevaron al cuartel de exterminio
de Simón Bolívar, estuvo en Villa Grimaldi y uno ve hoy que este es un lugar de
paz, es un lugar oxigenado de un medio ambiente precioso, pero está oxigenado
también, por todos esos sueños de mucha gente que padeció aquí el dolor de
soportar su propia historia, yo creo que aquí tenemos que animarnos nosotros,
este es un lugar de paz y también de recogimiento, pero es un lugar de donde
uno suma fuerzas, aquí ahí vibras positivas que nos deben empujar a resolver
todo esto, que nos relata el libro de Javier lo hace de una manera; yo diría
aceptada del punto de vista de lo literario es un libro que no aburre, uno se
mete en una historia como tantas otras historias, yo creo que ahí viene el gran
desafío para los periodistas, cientistas sociales, la gente de las
comunicaciones, porque hay miles de historias más que necesitan ser narradas y
probablemente, a lo mejor no alcanzarán los mismos brillos que tiene el libro
de Javier, pero si van a dejar al descubierto que Chile, que pareciera que
avanza con toda normalidad, a veces donde los desaparecidos son unos simples
números, donde hace falta darle corporalidad a cada nombre de las victimas, porque
muchos de lo que estamos viviendo hoy se lo debemos a ellos. Muchas de las
libertades que disfrutamos hoy es gracias a gente que sostuvo hasta en la
tortura sus ideales y sus sueños de una sociedad mejor, es un libro
absolutamente conmovedor, el nivel de compromiso de empresarios conocidos que
comulgan todos los domingos con este financiamiento, de esta máquina de matar
que era la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), lo dijimos ese día a mi
me gusta repetirlo, los militares chilenos queridos amigos, fueron altamente
eficiente en su tarea de exterminio, altamente eficientes hay que reconocerles
esa eficiencia en el manejo de una maquina trituradora de vida, como fue la
Dina, donde están los cuerpos de los compañeros desaparecidos y es una
respuesta que habla bien de la eficiencia de estos militares, que hicieron del
crimen una tarea rutinaria, hemos encontrado por simple casualidad de la vida
de los restos de las victimas de la Dina; Cantero, Atencio a Ávalos Davidson,
por una simple construcción de unos oleoductos en el sector de Peldehue, despedazado
después el cuerpo de Humberto Menarto de Jose Carrasco, en los Cerros de Chada;
carcomidos por los animales de la zona, también el cuerpo de Marta Ugarte; esos
son los signos que hemos encontrados sobre la tierra o bajo la tierra de esta
maquinaria de matar que fue la Dina, pero donde están los demás compañeros
donde quedaron sus cuerpos, hoy ya sabemos que esta gran tarea de exterminio,
contó en verdad con el lanzamiento al mar, tal vez con la política que se
condice con el grado de eficacia de que hicieron uso estos militares.
Este es un libro que
conmueve y felicito a Javier y todas las personas que tuvieron la posibilidad
de ubicar a Jorgelino Vergara, al final de cuentas pude hablar con el un día, el
me señaló: “…abogado lo que usted necesite lo puedo ayudar…”, me dejó un número
de teléfono, pero conociendo la faceta de este Jorgelino más humanizado, que
aparece en el libro al fin de cuenta, uno podrá decir el vivió, se formó con
los criminales, pero es un ser humano incluso este libro resalta en alguna
forma gestos de humanidad de alguien que uno ni siquiera pensaba, como la mujer
de Contreras, en que hay que separar a Contreras de su mujer, son dos seres
distintos; no podemos juzgar a las personas con una misma vara, la mujer de Contreras
fue absolutamente humanitaria con Jorgelino, porque pensó que este tenía la
oportunidad de generar un proyecto, un trabajo de vida a futuro, yo se si está
en condiciones de comprender en un primer minuto en esto, en lo que se estaba
metiendo después claramente, estaba involucrado en el tema y ahí yo divido el
alma de Jorgelino de un sujeto humilde, pero también aparece el alma de un
sujeto desalmado, es decir, estos que tienen el ánimo frío, estos sujetos que
son capaces de cualquier cosa, pero ahí viene todo el tema de la formación en
la cual indudablemente influye; Contreras, la Dina; porque lo transformó en lo
que es hoy.
Me alegro que el Ministro Montiglio hubiera
logrado esto, siempre en las causas de derechos humanos, esperamos el golpe de
suerte, yo creo que el ministro Solís, todavía está esperando que llegue un
tipo en que le aclare muchas cosas y le entregue información y se de lo que
decíamos acá y que haya alguien que confesó el crimen de los hermanos Vergara
Toledo y todos los grandes crímenes, siempre ha habido un soplo de verdad que
viene desde las propias huestes de estos sectores herméticos, como son los
aparatos de seguridad; siempre hay alguien que habla aquí fue Jorgelino y el
abrió un camino ese tremendo camino, a mi hay una cifra y un dato que me
estremece vamos a cumplir 40 años para una investigación judicial es fatal, no
están los victimarios, no están las victimas, se mueren los testigos, no
existen los documentos y la pregunta que se hace es ¿como construimos verdad?, ¿como
construimos y descubrimos estos crímenes; que son los peores crímenes desde el
estado?, los crímenes que están condenados a no ser resueltos nunca, por eso
alegrémonos cuando en esta causa tenemos una tremenda cantidad de procesados y
sabemos verdad que por ese cuartel de exterminio, pasaron tantos chilenos cuyo
paradero hasta el día de hoy desconocemos, quiero saludar en consecuencia el
libro de Javier, la hermosura del texto, lo duro de su relato pero este es el Chile
en el cual muchas veces quisiéramos no reconocer, quisiéramos dar como superada
esta etapa y cuando digo hay una cifra, una cantidad de ellos que me duele
dentro de los 40 años, pero sin embargo, cuando los veo a ustedes me dicen: que
ni cuarenta años van hacer suficientes, para que olvidemos esta gente y este
país tiene una conciencia moral, tiene las profundidades de ensuciar este país,
esa creencia de que no vamos a olvidar a nuestros desaparecidos, ejecutados a
nuestros mártires y que por ellos; vale la pena desplegar todos los esfuerzos,
porque no hay un solo crimen que no se puede resolver, cuando existen jueces
voluntariosos y dedicado a este tema, se pueden resolver todos esos crímenes,
creo que ese es el mejor saludo que podemos dar desde Villa Grimaldi, a tantas
victimas que pasaron por acá y que hoy nos entregan un día lindo como para
fortalecer nuestras fuerzas; y para seguir avanzando en la verdad y justicia, Muchas
Gracias.
Al término del lanzamiento del libro se marchó
hasta el cuartel de exterminio Simón Bolívar
y en todo el camino, se realizó un performance caracterizando la detención y
tortura de los detenidos
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