El uso de la escopeta antimotines por parte de Fuerzas Especiales (FF.EE.) de Carabineros ha estado en la polémica tras el estallido social, debido a la alta cantidad de heridos con perdigones.

Carabineros debió acotar su uso a solo situaciones de riesgo vital luego que se revelara que los balines no eran 100% de goma, sino que también tenía metales como plomo.

Pero eso no fue lo único. Cientos de chilenos han registrado problemas oculares debido a los disparos, siendo el caso icónico de Gustavo Gatica, quien perdió sus dos ojos quedando ciego.

El informe de Human Rights Watch, que constató violaciones a los derechos humanos por parte de la policía, incluyó que existía poca preparación para usar estas escopetas.

Así lo especificó La Tercera, que reveló el detalle de qué es lo que aprende un aspirante de Fuerzas Especiales para lograr ser parte de dicha unidad.

Quienes quieran ingresar a FF.EE. deben pasar por una especialización tras egresar de la escuela, a la que se postula tras una evaluación física y sicológica.

Tras ello, son sometidos a una capacitación de 100 horas divididas en 10 días, donde se les instruye sobre doctrina institucional, leyes y operaciones.

Esta última parte es a la que más tiempo se le dedica, con 86 horas. Allí tienen cuatro horas para recibir instrucción sobre autocontrol, seis horas para primeros auxilios, cuatro horas para técnicas de detención y dos horas para aprender sobre químicos disuasivos. En los ramos de doctrina, se imparten cuatro horas de derechos humanos.

A nivel de escopetas antidisturbios, los funcionarios reciben una instrucción de ocho horas para tener nivel usuario de dichas armas. Además, en dos horas aprenden sobre armamento y munición no letal y también sobre bastón de servicio y defensa.

Los seleccionados para ser parte del grupo reciben una bonificación del 30% de su sueldo.