por Boris Bezama 22 diciembre, 2020
En el café Punto C –el espacio preferido por los exdirigentes de la Nueva Mayoría durante la última administración de Michelle Bachelet–, ubicado en calle Moneda, a solos pasos del Palacio de Gobierno, se realizará hoy por la mañana la reunión de formalización de un nuevo bloque opositor, cuyo principal objetivo será enfrentar en una sola lista las candidaturas a la Convención Constitucional, pero también aquellas a gobernadores regionales, alcaldes y –aunque hasta ahora no ha sido acordado cien por ciento– a la presidencial del 2021.
El ingreso al café lo harán los presidentes y las presidentas de los seis partidos junto a sus secretarios generales, sin aspaviento y sin la preocupación por lo que puedan captar los medios de prensa, puesto que ni siquiera la actividad fue agendada en la pauta diaria. Pero todos y todas están conscientes de que esta reunión constituirá “un antes y un después” en materia de alianzas políticas.
Los comensales suscribirán un acuerdo que marcará el inicio de una nueva etapa, donde el Partido Comunista romperá finalmente con sus exsocios de la Nueva Mayoría, dejando atrás varios años juntos pero no revueltos, en una relación de la que muchos de ellos hoy no se enorgullecen.
Ese “matrimonio por conveniencia” que le permitió ocupar puestos de primer orden en Bachelet 2 –al menos dos ministros– es un tema que está zanjado en el documento oficial del XXVI Congreso Nacional del PC, elaborado el 11 de diciembre. “El Congreso Nacional llama hacia la formación de una coalición más robusta en su composición, lo que allana el camino para la consolidación de una fuerza política con capacidad de soportar los cambios que Chile requiere, pero que también permite avanzar con más certeza hacia la democrática hegemonía que necesitamos las fuerzas sociales y políticas antineoliberales para derrotar a la derecha y para impedir que sectores que han estado por los consensos y acuerdos con ella, impongan sus posiciones restauradoras de diversas formas de neoliberalismo”.
El factor Jadue
Si bien el mensaje fue claro y categórico, al igual que en las relaciones de pareja, hay una parte que nunca quiere convencerse de que todo ha llegado al final y hace todo tipo de esfuerzos para que ello no se concrete. Pero lo cierto es que Guillermo Teillier, por el PC; Jaime Mulet, por la Federación Regionalista Verde Social; Tomás Hirsch, por Acción Humanista; Jorge Ramírez, por Comunes; Catalina Pérez, por Revolución Democrática; y Alondra Arellano, por Convergencia Social, se sentarán esta mañana en una especie de mesa Té Club junto a sus respectivos secretarios generales en un encuentro que no está programado para durar más de una hora y media y en el que el tema principal será constituir las nóminas de candidatos y candidatas que serán apoyados unánimemente por todas las fuerzas políticas. Será como la primera reunión de accionistas de una empresa, en la que –pasados unos meses– se deberá ahondar en el producto que más valor tiene: en este caso, la candidatura presidencial del alcalde Daniel Jadue.
De acuerdo a lo que aseguran en el PC, el tema no está definido y por ahora este bloque se abocará a los próximos desafíos: el 11 de enero, fecha para inscribir a los candidatos a constituyentes. Luego vendrán los acuerdos para apoyar a los postulantes a gobernadores regionales y a alcaldes, que serán definidos en principio el 11 de abril.
La otra oposición en Zoom
En el otro extremo de la oposición, y casi simultáneamente con el estreno en sociedad del nuevo bloque opositor, los presidentes de los partidos que conforman lo que se le conoce como socialdemocracia, integrada por Heraldo Muñoz (PPD), Álvaro Elizalde (PS), Carlos Maldonado (PR), Camilo Lagos (PRO) y Luis Felipe Ramos (PL), harán un llamado “a la unidad opositora más amplia” para enfrentar el futuro proceso constituyente.
Y en esta reunión, que no será presencial sino que muchos estarán siguiéndola por Zoom, se suscribirá una declaración de los parlamentarios Natalia Castillo (ex-RD), Vlado Mirosevic (PL) y Pablo Vidal RD), junto a los independientes Isabel Amor y Agustín Squella, candidatos a constituyentes. La idea sería plasmar esa necesidad de unidad que, por lo visto, hoy está muy lejos de concretarse.
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