Por Equipo Cambio21
La presidenta de la Agrupación de Familiares Detenidos Desaparecidos se refirió a la denuncia que llegó a nuestro medio sobre un edificio que habría albergado parte de los organismos de la CNI. Según la dirigenta hay una alta probabilidad de que en ese recinto hayan desaparecido prisioneros del régimen militar.
El reportaje de Cambio21ya causa sus primeras repercusiones. Según la investigación exclusiva de nuestro medio, en pleno centro de Santiago existe un edificio que habría albergado a parte de la CNI, organismo represor de la dictadura.
El reportaje de dos partes publicado en nuestro medio (lea aquí parte 1 y parte 2) llama la atención de organismos de derechos humanos. A su parecer, no sorprendería que, además, haya sido un centro de tortura en que murieron prisioneros del régimen de Pinochet.
En entrevista con Cambio21, la presidenta de la Agrupación de Familiares Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro, destacó que hay posibilidades que sigan apareciendo centros de torturas de los que nadie sabe.
Es una triste historia, el pacto de silencio sigue manteniendo parte de la verdad en secreto.
Aún en 2015 aparecen lugares cuyo pasado está relacionado con la dictadura...
Lo que pasa es que es tan posible, como que este no es el último lugar que conozcamos. Recordemos que a raíz de una investigación, alrededor del 2006, nos enteramos de la existencia del cuartel de exterminio Simón Bolívar.
El pacto de silencio de los civíles y uniformados de la dictadura, sin duda, entre otras cosas, oculta recintos de los aparatos represivos, también de la CNI. Ésta operó a lo largo de todo el país. No tengo la menor duda que no sólo operaron en los lugares conocidos como cuarteles de exterminio, tuvieron una infraestructura mucho mayor y por lo tanto lo que viene a revelarse ahora es parte del pacto de silencio que oculta toda la verdad de lo que fue el aparato represivo de la dictadura. No solo la Central Nacional de Información, sino que todo el aparato represivo, el comando conjunto, entre otras, siguen bajo ese pacto.
Entre otras cosas, significa no conocer nada también de su infraestructura que puede significar más edificios. Si es efectivo que este edificio fue de la CNI, también pudo haber sido un espacio de tortura, donde más de una de nuestras víctimas de la dictadura pudo haber perdido la vida.
El edificio de Av. Blanco Encalada 1935 ya despierta algunas alarmas |
El pacto de silencio se convierte en lo más triste de la historia: puede que nunca conozcamos toda la verdad...
Lo que pasa es que hay medidas que se pueden tomar para que ellos comiencen a hablar. Mientras sigan manteniendo su jerarquía uniformada, mientras sigan en la impunidad y no vayan a la cárcel, que se mantenga una ley de secreto por 50 años, mientras no se les degrade como cobardes traidores a la Patria, ellos se sienten amparados y protegidos y mucho menos van a romper el silencio.
La triste historia es que de aquí a 20 años van a morir todos y se irán con la verdad. Es cierto, pero las medidas se pueden tomar y se pueden hacer desde todos los poderes del Estado. Se puede presionar a las Fuerzas Armadas. Cuando uno observa que en la conmemoración del 21 de Mayo los altos mandos de la Armada salen con las medallas que reivindican la dictadura y hasta hoy no les pasa nada, con mayor razón no van a entregar la información que tienen.
¿Están empoderados...?
Y amparados. Amparados por el Estado y todos sus poderes para mantenerse con estas bravuconerías y este pacto de silencio... el tema es mucho más complejo
¿Ve miedo aún en parte de los políticos?
No. Aquí hay una falta de voluntad política. Hubo un acuerdo al inicio de la transición, y se ha respetado a raja tabla y ese es el que hay que romper, una vez por todas, para poder comenzar de verdad a construir un país democrático que quiere avanzar en reformas. Pero dentro de ellas, tiene que considerar lo que es la impunidad, porque no conocer la verdad es parte de ella.
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