Dos alumnas del Liceo Darío Salas pasaron 71 días sin ingerir alimentos.
Abandonar la medida es "una señal de fortaleza", dijo Maura Roque.
Cooperativa.cl
Abandonar la medida es "una señal de fortaleza", dijo Maura Roque.
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Cuatro escolares capitalinos que llevaban adelante una extensa huelga de hambre en demanda de mejoras a la educación anunciaron este miércoles su decisión de abandonar la radical protesta, un día después de que los estudiantes universitarios reunidos en la Confech accedieran sentarse a negociar con el Gobierno para destrabar el conflicto.
Se trata de las alumnas del Liceo Darío Salas Johanna Choapa y Maura Roque, que completaron 71 días de ayuno; Carla Fernández, del Liceo Experimental Artístico de Quinta Normal, y Francisco García, del Liceo Abdón Cifuentes. Estos dos últimos permanecieron 38 días sin ingerir alimentos.
"Bajamos la huelga como una señal de fortaleza, ya que nuestro lugar está en las trincheras del pueblo organizado, está en nuestros liceos manteniendo las tomas en alto, está en las calles junto con nuestros compañeros enfrentándonos a la represión si es necesario, para demostrar la justeza de nuestras ideas", señalaron en una declaración que fue leída por Maura Roque.
"El movimiento secundario nos necesita enteros, construyendo organización y posibilitando la lucha cotidiana en cada liceo y población que nos encontremos. No abandonaremos las filas de la lucha, nuestro compromiso se ha reafirmado en estos meses. Contamos con dignos ejemplos y con la inteligencia necesaria para este largo camino", añade la declaración.
Los alumnos agradecieron las muestras de solidaridad "de las organizaciones sociales, de trabajadores y estudiantes que estuvieron presentes en cada momento de nuestra huelga y se han hecho partícipes de la lucha frontal por la educación".
Se trata de las alumnas del Liceo Darío Salas Johanna Choapa y Maura Roque, que completaron 71 días de ayuno; Carla Fernández, del Liceo Experimental Artístico de Quinta Normal, y Francisco García, del Liceo Abdón Cifuentes. Estos dos últimos permanecieron 38 días sin ingerir alimentos.
"Bajamos la huelga como una señal de fortaleza, ya que nuestro lugar está en las trincheras del pueblo organizado, está en nuestros liceos manteniendo las tomas en alto, está en las calles junto con nuestros compañeros enfrentándonos a la represión si es necesario, para demostrar la justeza de nuestras ideas", señalaron en una declaración que fue leída por Maura Roque.
"El movimiento secundario nos necesita enteros, construyendo organización y posibilitando la lucha cotidiana en cada liceo y población que nos encontremos. No abandonaremos las filas de la lucha, nuestro compromiso se ha reafirmado en estos meses. Contamos con dignos ejemplos y con la inteligencia necesaria para este largo camino", añade la declaración.
Los alumnos agradecieron las muestras de solidaridad "de las organizaciones sociales, de trabajadores y estudiantes que estuvieron presentes en cada momento de nuestra huelga y se han hecho partícipes de la lucha frontal por la educación".
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