El 6% de reajuste de la casta VIP

Juan Guillermo Tejeda

Artista visual

 

 

Chapoteando en su negro y ciego jugo, nuestros diputados se han opuesto a quedar fuera del reajuste del 6% para el sector público, que en el caso de los funcionarios de la casta VIP equivale a casi a medio millón, sólo el reajuste, que es lo que cobra la media de los chilenos, y los hay que mucho menos.

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Un parlamentario chileno percibe cada mes unos 8 millones, lejos el sueldo más alto de todos los países de la OECD y, aparte de eso, están los gastos de representación. Y estos sueldos son pagados por el fondo común que obligatoriamente vía impuestos directos o indirectos hacemos todos los chilenos, incluyendo a viudas, pensionados, sectores vulnerables, personas que sobreviven apenas con cien mil pesos, y así son las cosas.
¿Cómo puede un representante cortar 20 o 30 veces lo que sus representados, todo eso con la plata de estos y, encima, autoaplicarse un aumento del 6%? En verdad, no hay sensatez que pueda cuadrar con una conducta así.
En lugar de representar a la gente se representaron a sí mismos, apegándose a su reajuste y a su billetera: Jenny Álvarez , Pedro Pablo Álvarez, Osvaldo Andrade, Ramón Barros, Germán Becker, Jaime Bellolio, Bernardo Berger, Lautaro Carmona, Juan Luis Castro, Marcelo Chávez, Juan Antonio Coloma, Daniel Farcas, Ramón Farías, Iván Flores, Gonzalo Fuenzalida, René García, Joaquín Godoy, Romilio Gutiérrez, Gustavo Hasbún, Javier Hernández, Joaquín Lavín L., Luis Lemus, Roberto León, Patricio Melero, Fernando Meza, Andrea Molina, Manuel Monsalve, Celso Morales, Claudia Nogueira, Iván Norambuena, Marco Antonio Núñez, Sergio Ojeda, José Miguel Ortiz, Diego Paulsen, José Pérez, Leopoldo Pérez, Jorge Rathgeb, Ricardo Rincón, Jorge Sabag, David Sandoval, Alejandro Santana, Marcelo Schilling, Ernesto Silva, Arturo Squella, Jorge Tarud, Renzo Trisotti, Joaquín Tuma, Marisol Turres, Jorge Ulloa, Ignacio Urrutia, Enrique van Rysselberghe, Mario Venegas, Matías Walker, Felipe Ward.

Conforman, pues, esta novedosa y transversal Bancada Autorreajustable 21 UDI, 10 RN, 8 DC, 5 PPD, 6 PS, 2 PR, un Amplitud y un PC. Vemos entre ellos al gran Osvaldo Andrade, al doctor Castro, a un Coloma, un Walker, un Rincón, un Lavín, y un Sabag representando a las familias varietales, también a los belicosos Tarud y Hasbún e, incluso, al incombustible Melero que lleva toda la dictadura y toda la democracia en alguna poltrona recibiendo emolumentos muy apetecibles a cargo de los contribuyentes.
Otros 33 diputados, en cambio, encabezados por Giorgio Jackson y Camila Vallejo, salvaron la dignidad y presentaron una moción que fue declarada inadmisible y finalmente derrotada. Ellos sintonizaron con la gente al pedir que no se les aplicara sobre su filete público mensual la salsa Strogonoff del reajuste.
No le dieron la espalda a su gente, pues, los diputados Sergio Aguiló, Gabriel Boric, Karol Cariola, Daniela Cicardini, Rodrigo González, Tucapel Jiménez, Vlado Mirosevic, Roberto Poblete, Alberto Robles, René Saffirio, Guillermo Teillier, Claudio Arriagada, Pedro Browne, Loreto Carvajal, Maya Fernández, Jorge Insunza, Felipe Letelier, Daniel Núñez, Yasna Provoste, Luis Rocafull, Alejandra Sepúlveda, Víctor Torres, Pepe Auth, Cristián Campos, Guillermo Ceroni, Iván Fuentes, Giorgio Jackson, Daniel Melo, Denise Pascal, Gaspar Rivas, Karla Rubilar, Leonardo Soto, Camila Vallejo. Y hay además siete parlamentarios que ante estas cosas tan rudas no están ni a favor ni en contra sino todo lo contrario, o sea, que se abstuvieron, se hicieron nube gris.
Uno piensa, cuando ocurren estas cosas, por ejemplo, en el presidente uruguayo Mujica. Y también en quienes entran y salen de los paraísos fiscales, o sea, en las cloacas fiscales (ahí aparecía nuestro sonriente Golborne con sus 33 y con Antonio Banderas), porque allí pueden llevar su dinero los poderosos a los que les da como lata pagar impuestos. Reglas inequitativas que son un desprestigio para la democracia y un insulto para los ciudadanos y ciudadanas normales, que no pertenecen a la Casta, que no son VIP, pero que están obligados a financiar a los VIP y a la Casta, a los que comen filete.
La Comunidad Europea acaba de nombrar Presidente al luxemburgués Juncker, que creó en su país uno de los paraísos fiscales o cloacas fiscales más apetecibles del mundo. Gracias a esas cosas las grandes empresas no pagan impuestos, pero la gente normal sí, atrévanse a no pagar.
Los impuestos deben ser para todos, no puede ser que los ricos se hagan cada día más ricos. Y los representantes no pueden cobrar 20 o 40 veces lo que ganan sus representados, sacando su jugosa dieta de esos sueldos a menudo insuficientes o miserables. Y, más encima, subirse el sueldo. Ughhhhh!