Ex agentes de la Dina y la CNI condenados por violaciones a los derechos humanos tienen su propia batalla al interior de Punta Peuco y en Peñalolén. Abogados confirman los hechos y afirman que laqs peleas “son algo constante”. Incluso jurista señala una agresión entre Contreras y Espinoza
Fuente Cambio 21
El informe elaborado por el fiscal judicial de la Corte de Apelaciones de Santiago, Daniel Calvo, sobre el penal de Punta Peuco, da cuenta que los reclusos han tenido frecuentes altercados y se han debido implementar medidas de castigo. Escupitajos, riñas e incluso amenazas de muerte forman parte de la situación.
El reporte corresponde a la visita semestral que debe realizar el funcionario, encomendado por la fiscal de la Corte Suprema Mónica Maldonado.
Entre los que se han visto involucrados en las disputas está el ex carabinero José Fuentes Castro, condenado a presidio perpetuo por el caso degollados, enfrentado con el ex CNI Iván Belarmino Quiroz Ruiz, además de escupir la comida de otro interno.
También se conocieron amenazas contra Christopher Willike, condenado en el caso Prats, y un fuerte altercado entre los ex agentes de la DINA Basclay Zapata y Francisco Ferrer Lima.
Sin embargo, el abogado Juan Carlos Manns, que defiende el ex DINA Francisco Ferrer Lima, desmintió la situación: “Yo estuve en Punta Peuco ayer (jueves) y no me informó de nada, además hablé con los gendarmes y tampoco me mencionaron algo así. Creo que debieran informarse más para hacer este tipo de declaraciones y estar hablando de situaciones hipotéticas no es bueno”.
“Francisco tiene una conducta ejemplar e incluso estaba en clases cuando lo fui a ver. Simplemente no corresponde decir estas cosas y es bastante extraño”, aseveró el jurista.
Por otra parte, el abogado de derechos humanos Héctor Salazar confirma lo que dice el informe e incluso dijo a Cambio21 que “Manuel Contreras (condenado por el caso de Orlando Letelier) y Pedro Espinoza (condenado por el caso Prats) tuvieron que ser separados porque protagonizaron una fuerte pelea”.
Salazar señala que “no es un escenario que sea nuevo y se da en todas las cárceles. En general los ambientes son tensos y van afectando a los reos de manera psicológica y en este caso la situación es más fuerte porque son presos que están condenados a muchos años”.
“Lo importante –prosigue- es saber si son por temas de convivencia o temas relacionados directamente con la política”.
A juicio del abogado, “lo que se necesita para solucionar estos problemas es, junto con las medidas de resguardo para que la sangre no llegue al río, entregar apoyo psicológico”.
En tanto, Hiram Villagra, que también es abogado de derechos humanos, señaló a Cambio21 “han existido varios altercados menores y yo he sido testigo de eso e incluso escuche conversaciones (…) es algo constante”.
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