Carabineros apartó de sus funciones a importantes y altos oficiales Miguel Ángel Castro y César Rojas, mientras se investiga su eventual responsabilidad en la destrucción de parte de la marihuana incautada en un operativo policial
Fuente Cambio 21
Carabineros apartó de sus funciones al jefe de la Prefectura Santiago Central, coronel Miguel Ángel Castro, y al jefe de la Segunda Comisaría de Santiago, mayor César Rojas, mientras se investiga su eventual responsabilidad en la destrucción de parte de la marihuana incautada a un joven con el supuesto fin de atenuar su responsabilidad penal.
Según informa El Mercurio, el episodio comenzó el 31 de agosto, en el barrio República, cuando carabineros incautaron $50 mil en marihuana (equivalentes a entre 40 y 50 "pitos", dependiendo de su pureza) a Rocío Padilla y a Cristián Rebolledo, de 19 años. Este último es hijo del prefecto Hugo Rebolledo, jefe regional de Aysén de la Policía de Investigaciones, con 31 años de servicio y especialista en antinarcóticos.
Cuando ambos jóvenes fueron entregados a la justicia, sin embargo, su caso fue catalogado como consumo personal, pues la mayor parte de la droga habría sido incinerada, lo que ahora es objeto de un sumario en la policía uniformada. El general José Ortega, jefe de la Zona Metropolitana de Carabineros, confirmó la indagación interna y explicó que para darle mayor transparencia al procedimiento administrativo, ambos oficiales fueron removidos de sus cargos, aunque no desvinculados.
Castro -con 29 años de servicio- se mostró afectado. "No tengo responsabilidades en este tema", declaró. Fuentes ligadas al caso aseguraron que el coronel presentó su expediente de retiro. Asuntos Internos de Carabineros entregó los antecedentes a la justicia militar. "También haremos una ampliación a la denuncia que se hizo en el Ministerio Público", explicó el general Ortega. "Estos hechos los consideramos graves", añadió.
Consultada por la prensa, Investigaciones declinó referirse al caso.
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