COMUNICADO PRENSA

Estimados amigos y amigas, compañeros y compañeras;

Antes que todo, reciban nuestros cordiales saludos. A continuación, esperamos que esta presentación cumpla con el propósito de dar continuidad al trabajo fijado a partir del 1 de julio en la reunión sostenida en la Fundación Salvador Allende, acordando que en lo sucesivo, este grupo de trabajo recibiera el nombre de “Chile no se Rinde”.

Chile no se Rinde es un llamado a artistas, intelectuales, científicos y académicos a articular acciones destinadas a preservar y promover una cultura de los valores laicos y republicanos en Chile.
Chile no se Rinde entiende la democracia como el gobierno de las mayorías y el respeto por las minorías, aboga por un Chile en el que ninguna de las necesidades básicas sea motivo de lucro y en el que todos los habitantes tengan garantizados el respeto de sus derechos humanos, el derecho a la salud, a la educación, al trabajo y a una vejez digna tras una vida de trabajo.

Chile no se Rinde no se plantea como alternativa a ningún movimiento o partido político sino como un puente que articule acciones destinadas a conquistar espacios de participación y colaboración relacionando diversos grupos de interés específico en una visión unificadora de la dignidad ciudadana en una sociedad que valoriza la diversidad y garantiza la libertad.

Chile no se Rinde es a la vez un intento de reconstruir una relación que en el pasado hizo grandes aportes a la cultura republicana de Chile, aquella entre los artistas, intelectuales, científicos y el mundo de los trabajadores, desde luego teniendo en cuenta los desafíos culturales, existenciales y políticos del siglo XXI fuertemente marcado por el extraordinario desarrollo tecnológico y las problemáticas propias de un mundo con una enorme densidad de población humana, enfrentado a desafíos sociales, ambientales y energéticos inéditos. Desafíos que no pueden ser afrontados con instrumentos de análisis y soluciones propios del siglo XIX.

Chile no se Rinde llama a la acción por un Chile en el que todos los ciudadanos tienen cabida en la medida de que su participación se enmarque en el respeto de la dignidad humana y la justicia social.

UN ABRAZO A TODOS Y A TODAS.
Septiembre, 2010.