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miércoles, 5 de enero de 2011

Pedirán a Aduanas iniciar acciones legales contra empresa Cencosud

Pedirán a Aduanas iniciar acciones legales contra empresa Cencosud por venta de productos rotulados como "ayuda humanitaria" para víctimas del terremoto, eludiendo impuestos

“No es posible que los representantes del Estado no hagan nada frente a lo que es claramente un intento de fraude”, dijo diputado Gabriel Silber. Cencosud agrupa a Jumbo, Santa Isabel y Paris, todas propiedad del empresario Horst Paullmann.

Fuente Cambio 21

Los diputados Aldo Cornejo, Gabriel Ascencio, Pablo Lorenzini y Gabriel Silber sostuvieron una reunión con el director Nacional de Aduanas, para solicitarle formalmente que presente acciones legales en contra de la empresa Cencosud (Jumbo, Santa Isabel, Paris, propiedad del empresario Horst Paulmann), tras la irregularidad detectada por la Contraloría General de la República en cuanto al ingreso de mercaderías a las que se se les aplicó la Ley 16.282 sobre sismos y catástrofes, que permitió la entrada de insumos sin el pago de impuestos ni aranceles.

En agosto del 2010, Aduanas fiscalizó si efectivamente esta empresa contaba con el certificado de donación,y la Onemi respondió que el ingreso no correspondía a donaciones, por lo que se les cobró los impuestos y aranceles del 6% y 19% respectivamente, correspondientes a los 183 camiones enviados por el paso fronterizo de Los Libertadores.

El hecho quedó al descubierto cuando la Contraloría, tras la auditoría realizada a la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), detectó el congelamiento de pagos a la empresa Cencosud Retail S.A., por la compra de alimentos que irían destinados a ayudar a los afectados por el terremoto y posterior tsunami del 27 de febrero del 2010.

Ante esto, el diputado Gabriel Silber, señaló que "no es posible que empresarios ingresen mercancías como ayuda humanitaria, sin pagar por ello los derechos correspondientes, y luego esas mismas mercancías se las vendan al Estado y los representantes de este no hagan nada frente a lo que es claramente un intento de fraude".

"Por ello, hemos pedido toda la información respectiva a las autoridades de Aduanas y seguiremos investigando esta situación y otras que se pudieran haber cometido a propósito del terremoto", puntualizó el parlamentario.

Pagos pendientes

El problema radica en que la empresa Cencosud, ingresó estos alimentos a través del paso fronterizo Los Libertadores, como ayuda humanitaria para los damnificados de la tragedia y no como productos destinados para su venta en el país.

El documento de la Contraloría señaló que los pagos corresponden a las "facturas N°s 687915, 2953501 y 2963502, por $3.467.673.098, $ 2.458.249.115 y $ 581.434.494, respectivamente, todas del mes de marzo de 2010", se retuvieron "debido a que los antecedentes que respaldan el cobro efectuado por el proveedor, indican que bienes valorizados en un monto de $2.597.521.616, habrían sido ingresados al país desde Argentina, a través del Paso Aduanero Los Libertadores, no como productos importados para su venta en el país, sino que como asistencia humanitaria a la República de Chile".

"Lo anterior, consta en los Manifiestos Internacional de Carga y en las facturas de la Agencia de Aduanas respectiva, las que señalan que corresponden a mercaderías en donación, acogiéndose a las franquicias aduaneras dispuestas por la autoridad", añade el informe.

De esta manera, el organismo contralor advierte que "los pagos se mantendrán pendientes en tanto Cencosud no aclare la modalidad de ingreso de los bienes adquiridos y el pago de los derechos correspondientes, lo cual deberá ser acreditado documentadamente ante esta Contraloría General".

Esta irregularidad fue descubierta luego que la división de auditoría administrativa de la Contraloría encontrara en el Regimiento Bellavista -utilizado como Centro de Logística por la Onemi- "una considerable cantidad de víveres, adquiridos a la empresa Cencosud, sin distribuir a las familias damnificadas".

Sin embargo, el organismo manifiesta que "si bien es cierto el ingreso de los alimentos adquiridos a la empresa Cencosud S.A. al territorio nacional se encuentra pendiente de aclaración, puesto que los documentos de internación indicaban que correspondían a ayuda humanitaria, dichos productos fueron comprados por la Onemi para ser entregados a los damnificados del terremoto, por lo cual no corresponde, que por la situación pendiente de aclarar por esa empresa, los bienes se mantengan en forma indefinida sin ser utilizados con el fin para el cual fueron adquiridos".

Según la Onemi, estos productos fueron comprados a granel por la administración anterior a la empresa, la cual no disponía de todo el stock, razón por la cual lo solicitaron a Argentina. Por ese motivo, señalan en el organismo, no les correspondía emitir ese documento, necesario para la empresa y evitar pagar los tributos.

Al respecto, el secretario general de Aduana, Fabián Villarroel, dijo a La Segunda que para el terremoto se procedió según lo indicado en la ley que fija disposiciones para casos de catástrofes, con lo cual los productos, previa declaración como donación, podían ingresar al país sin pagar impuestos. "Pero hay que recordar que Aduana no sólo se encarga del cobro de los derechos aduaneros, sino también de la fiscalización posterior", señaló Villarroel.

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