César Bunster, líder de Frente Patriótico Manuel Rodríguez que organizó el atentado contra Pinochet:

César Bunster, líder de Frente Patriótico Manuel Rodríguez que organizó el atentado contra Pinochet: "Si bien no existen los Pinochet en este gobierno, aún está presente el pinochetismo"

Por Teresa Frías K.

"Nosotros queríamos acelerar la llegada de la democracia y poner fin a la dictadura, pero sinceramente no sé si hubiera pasado así, si se hubiese concretado el atentado. Pensábamos que sacando de la cúspide a Augusto Pinochet terminaría todo el infierno que estábamos viviendo", aseguró a Cambio21 el ex integrante del comando que intentó asesinar a Augusto Pinochet.

A 24 años del atentado de Augusto Pinochet, uno de los principales organizadores, militante entonces del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, dio a conocer algunos detalles del plan que finalmente se vio fracasado y aseguró al diario francés "L'Humanité" que éste se inspiró en la ETA, recordando que tuvo que modificar el plan inicial "optando por el esquema de una emboscada".

En conversación con Cambio21 aseguró no arrepentirse de lo sucedido. "Haciendo un balance de la acción, considero que fue justa, una acción de la cual no me arrepiento y ninguno de los que participamos, creo. Fue un legítimo derecho del pueblo", sentenció.

Bunster fue candidato por el Partido Comunista a alcalde de Puente Alto en la última elección y hoy en día es parte del Comité Central. Ante la pregunta de qué hubiese pasado si el atentado se hubiese concretado, Bunster aseguró que "es lo mismo que día tras día me pregunto y quizás mucha gente también lo hace, si bien nosotros queríamos acelerar la llegada de la democracia y poner fin a la dictadura, sinceramente no se si hubiera pasado así".

En esa línea agregó que "pensábamos que sacando de la cúspide a Augusto Pinochet terminaría todo el infierno que estábamos viviendo, viendo como mes a mes más gente era asesinada sin importar si eran niños o mujeres, las que incluso algunas de ellas estaban embarazadas".

Los otros frentistas

La investigación del caso quedó en manos del entonces Fiscal Militar Fernando Torres Silva, cuyo primer gran acierto fue el de registrar partes de huellas dactilares halladas al interior de la casona arrendada en el pueblo de La Obra a la entrada del Cajón del Maipo. Esto fue posible a pesar de que los atacantes habían adoptados medidas de seguridad para evitar dejar evidencias que los pudiesen identificar.

En octubre de 1986 son detenidos la mayoría de los frentistas que participaron en el atentado, casi todos mientras se encontraban realizando acondicionamiento físico en el Parque O'Higgins. La identificación de uno de ellos (Juan Moreno Ávila o "Sacha") mediante peritos en dactiloscopía permitió dar con su paradero y posteriormente identificar al resto, ya que la CNI poseía un archivo dactiloscópico de personas que habían sido anteriormente detenidas por su participación en atentados, sabotaje o protestas.

Unas semanas más tarde caen detenidos los frentistas que se encargaron de la distribución del armamento, entre ellos Vasili Carrillo.

En junio de 1987 muere José Joaquín Valenzuela Levi en el marco de la Operación Albania. A fines de 1988 corre la misma suerte Cecilia Magni junto a Raúl Pellegrin días después del atentado al Retén de Carabineros de Los Queñes, al interior de la cordillera frente a Curicó.

De los frentistas detenidos, gran parte logró escapar de la ex Cárcel Pública de Santiago durante la Gran Fuga de 1990. Los demás fueron indultados o les fue conmutada su pena por la de extrañamiento. Uno de estos últimos, Juan Órdenes Narváez, murió en Bélgica en 1990 en un accidente automovilístico mientras cumplía su condena.

Mauricio Hernández Norambuena se encuentra cumpliendo pena de cárcel en Brasil por su participación en el secuestro del empresario brasileño Washington Olivietto, reapareciendo en la escena pública tras encontrarse en la clandestinidad luego de protagonizar en 1996 una espectacular fuga en helicóptero desde la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago. Con excepción de este último frentista, ninguno de los participantes en la preparación y/o ejecución del atentado se encuentra cumpliendo pena de cárcel.

Bunster por su parte estuvo 18 años viviendo clandestinamente bajo el nombre de su hermanastro. "Para mí era muy difícil volver a encontrarme con el resto de mis compañeros y recién el 2004 pude volver a vivir una vida normal pero ya era tarde porque la mayoría no está en el país y otros han fallecido". Si recuerda a Cecilia Magni, con quien tuvo más contacto debido a que hizo de pareja ficticia de ella para poder arrendar las casas desde donde iniciaron el atentado. "Para mí, ella era mi jefa, de hecho la conocí bajo el nombre de la "Comandante Tamara" y tiempo después supe su verdadera identidad. Para mí era una gran persona y humanamente hablando era excelente".

César Bunster, actualmente dedicado a las traducciones, pasó este último año en Chile y, por ende, ha vivido el primer año de un gobierno de derecha y claramente una opinión formada sobre su desempeño.

"Por desgracia para nuestro país y nuestra historia en este año que lleva gobernando la derecha han habido una serie de escándalos de personas que estuvieron en dictadura, pienso que no se va a acabar nunca y que si bien no hay Pinochet en este gobierno, aún está presente el pinochetismo", concluyó.